Gran primer cuarto del Hiopos y sensacional remontada vasca sin premio
Los catalanes llegaron a estar casi treinta puntos arriba con el 62-33 y, a falta de cinco segundos para el final, el Baskonia se puso a cuatro con el 84-80.
El Hiopos Lleida era consciente de la importancia que tenía crear un ambiente caliente para tener opciones de vencer a un conjunto de Euroliga. Por eso, desde el primer minuto, el Hiopos Lleida estuvo muy reforzado por su afición. Goloman era duda pero entró en la lista y ya jugó en el primer cuarto. El descartado fue el joven Dabo. En el Baskonia, baja de Howard (mano y fiebre) y Forrest (isquios). El que sí entró en dinámica fue Joksimovic, que había tenido gripe en los últimos partidos. Pero no jugó.
Fue un partido especial para Rafa Villar, que estuvo en Lleida dos temporadas y media y que formó parte del equipo que ascendió a la Liga Endesa. Fue ovacionado en la presentación del Baskonia, entró en el quinteto inicial y dejó la cancha con empate a 5 en el minuto 4. A partir de ahí, socavón total para los vascos, encajando un sonrojante parcial de 22-2. Batemon y Mikel Sanz eran los principales artilleros pero, en general, todo el Hiopos fluía a la perfección. Eso, y una zona 2-3 que se le atragantó al equipo de un Galbiati que hacía cambios de cuatro en cuatro.
En el conjunto vasco solo daba la cara en ataque Hamidou Diallo, que consiguió 8 de los 11 puntos de su equipo. 6 en 6 minutos, aportación ofensiva ridícula. Y al Lleida le salía todo. El primer cuarto terminó con un contundente 28-11. Después de las buenas sensaciones ante el Dubái, Anadolu Efes, Tenerife y Virtus de Bolonia, el equipo vitoriano volvía a las andadas. De nuevo, la cara mala de un conjunto desbordado por el rival. La misma imagen que en los primeros partidos de la temporada cuando la figura del entrenador italiano se empezaba a poner en cuestión. Aquel Baskonia del 0/6 en las primeras jornadas de Euroliga. Preocupación absoluta y fiesta en la grada ilerdense. De nuevo, 0/8 en triples en los primeros diez minutos.
Las cosas no cambiaron demasiado en la segunda entrega ya que al descanso se llegó con un 49-28. Agada y Ejim hacían mucho daño, también Krutwig. Los locales consiguieron 12 puntos en la pintura en ese cuarto y, los vitorianos, cero. Menos mal para el Baskonia que Simmons enchufó cuatro triples. Pero no se dominaba el rebote, se defendía flojo y se cometían muchas pérdidas. El atasco ofensivo de los alaveses era grande gracias a una meritoria defensa catalana. Luwawu-Cabarrot, jugador franquicia este año, despertó en el minuto 17 consiguiendo su primera canasta. Segundos después enchufaría su primer triple. Pero el Hiopos Lleida le estaba dando una lección al rival. Los de Gerard Encuentra se fueron a los vestuarios con 1 pérdida en todo el partido. El Baskonia acumulaba 7.
Segunda parte de locura
Las diferencias fueron aumentando (62-33, min. 26) y eso que Simmons seguía a lo suyo con los triples. Pero el porcentaje de tiros de dos era paupérrimo (23 %). Fue cuando Galbiati decidió meter tres bases simultáneamente para tener manejadores en la cancha. Pero ya era demasiado tarde y lo único que consiguió el Baskonia fue maquillar el resultado cuando no venía a cuento. Se había suicidado en el primer cuarto, lo había empeorado en el segundo y parte del tercero y ya no tenía nada que hacer. Un buen parcial favorable para los vascos colocó el 64-47, por debajo de los 20 de diferencia gracias a un Sedekerskis inspirado en defensa y en ataque.
El duelo vivió algunos espejismos con el 80-74 del minuto 38 y, sobre todo, con el 84-80 a falta de 5 segundos para finalizar el partido. El Hiopos estaba atascado y se le hacía muy largo el partido. Pero entre Batemon, desde el tiro libre, y Ejim resolvieron el entuerto y sacaron adelante una victoria que merecieron. Diagne también hizo muchas cosas buenas que quizás no salen luego en las estadísticas. Curiosamente, el Baskonia fluyó mejor con Nowell de base que con Simmons, que se limitó a meter triples pero no hizo jugar a su equipo con fluidez. Además, falló dos bandejas fáciles en momentos de plena remontada. Semana larga la que le queda al equipo de Galbiati con viajes a Sofía (Hapoel), Belgrado (Maccabi) y Barcelona (Liga ante los culés).
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