Dos opciones para el Baskonia: octavo o décimo

El Baskonia busca la victoria ante un rival directo en la lucha del play-in, la Virtus de Bolonia, con la que está empatado a 17 victorias. El viernes pasado ganó en Madrid y consiguió el pase matemático. Ahora, el objetivo es asegurar la octava plaza. Si gana, la mantendrá y se medirá en Belgrado y a puerta cerrada con el Maccabi. Si cae en Serbia, tendría otra oportunidad para pasar a cuartos, esta vez en el Buesa, frente al ganador del Efes-Virtus.

Por el contrario, si hoy pierde, y tras el triunfo del Efes frente al Estrella Roja, descenderá hasta la décima posición y se enfrentará con los turcos en el Sinan Erdem. Para alcanzar el playoff, debería vencer en Estambul y, luego, en la cancha del perdedor del Maccabi-Bolonia.

Dusko Ivanovic, que tiene la baja de Khalifa Diop, lo tiene bastante claro: “Es muy importante que a estas alturas de la competición tengamos la posibilidad de depender de nosotros mismos. Si ganamos, conseguiremos el puesto que estamos buscando”, comentó el entrenador baskonista. Para ello tendrá que defender bastante mejor que el pasado domingo en Valencia donde llegó a encajar 111 puntos en la Fuente de San Luis en Liga.

El equipo vasco cuenta con el máximo artillero de la competición y también de la Liga Endesa. Se trata del estadounidense Markus Howard, que comentó que “creo que todavía tengo muchas cosas que mejorar. Esa es la belleza del baloncesto, que nunca somos un producto terminado”. Una de las cosas que deberá vigilar es no cargarse de faltas personales ridículas que le llevan demasiado tiempo al banquillo.

El que tiene cada vez menos protagonismo dentro del equipo es Jordan Theodore, un base que llegó a Vitoria procedente de París con la etiqueta de ser cerebral y jugar para los demás más que para su estadística. Pero la sensación es que se ha estancado y que Chris Chiozza ha vuelto a coger más peso dentro de la plantilla. El incuestionable en ese puesto de uno, en cualquier caso, es Codi Miller-McIntyre.

Una curiosidad. Moneke lleva gafas de repuesto por si se le rompen a lo largo del partido. El pasado viernes, en el WiZink Center, vivió una noche de espanto porque se le rompieron las que llevaba y no tenía otras. Los asistentes de Ivanovic hicieron lo que pudieron con pegamento, esparadrapos y otros utensilios. Lo inteligente, siendo consciente de que siempre hay estopa por los lugares en los que se mueve, es llevar otras de recambio.

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