El Unicaja se queda sin el sueño del millón

La ‘maldición del anfitrión’ volvió al Martín Carpena para dejar sin el sueño del millón a un desconocido Unicaja que fue incapaz de superar al Telekom Bonn, el típico equipo alemán americanizado y que jugó al ritmo que quiso TJ Shorts, un base estadounidense bajito de 1,75 y que tiene similitudes con aquel Larry Wrigth, que destrozó al Barcelona en una final de Copa de Europa jugando con el Banco di Roma. Jugó, hizo jugar y amargó a los locales que tuvieron un día terrible con los triples (7/34). Un minuto pésimo de los alemanes dio al Unicaja la opción de tener en la última jugada un triple ganador que Perry desaprovechó. No habrá final española y el duelo entre Unicaja y Lenovo Tenerife pasará de revancha de la Copa a consolación (mejor desconsolación). La gran final enfrenará a los alemanes con el Hapoel.

Ambiente tremendo en el Carpena con 8.000 pasionales seguidores empujando al Unicaja frente a 400 alemanes. Muchos del Hapoel, felices por su agónica victoria ante el Tenerife, se quedaron a disfrutar del mejor baloncesto. Los verdimorados arrancan con la efervescencia de Darío Brizuela (20-11 min. 7). Tuoman Lisalo, el entrenador finlandés del Bonn para el partido para evitar este conato de fuga. Lo que llega es un 0-9 de parcial y turno para Ibon porque Shorts, el base de 1,75 metros empezaba a hacer de las suyas.

El Telekom Bonn es un equipo de características similares a las del Unicaja con velocidad, defensa seria y buenos tiradores. Los malagueños estaban realmente incómodos. 24-31 min. 13 y nuevo tiempo muerto de Ibon porque se jugaba a lo que quería Shorts y sus escuderos Delaney y Hawkins. Triple del chileno Sebastián Herrera (29-38) y tercera personal de Kravish. Este no era el Unicaja y en la cancha solo se escuchaba a los incondicionales germanos que festejaban el recital de su MVP Shorts para poner un tremendo 31-41 con el que se llegó al intermedio.

El tercer cuarto sigue con temblores (33-46) y misma sensación de espesura malagueña. Nervios, precipitaciones y pérdidas. Había que apretar los dientes. Con 38-48 una técnica a Hawkins por flopping pare retomar el famoso “¡si se puede”. (42-48 min. 25). El Carpena sube decibelios. Unicaja mejora su defensa pero sigue mal en el tiro y la circulación.5/23 en triples para explicar el 50-57 con el que se cierra el tercer parcial.

La recta final ofrece más incertidumbres que certezas. El Unicaja añora el acierto puntual de sus centellas, Perry y Carter. Tampoco Kravish está fino bajo aros y con el tiro de cuatro metros (52-58 min. 32).

Los verdimorados defienden en zona y aparece Carter para poner el 55-58 y levantar nuevamente a la ‘marea verde’. Había esperanza. Los de Ibon reman hasta 57-58 a ritmo de hormiga. En vano. Los nervios y las malas decisiones penaban al desafortunado anfitrión. Y Shorts a lo suyo. 58-67 a falta de dos minutos y Kravish, eliminado por personales.

Con todo perdido el Unicaja tira de coraje como pollo sin cabeza, pero coraje al fin y al cabo. Ha tardado en darse cuenta que el Telekom está agotado. A falta de 19,6 segundos el marcador era 65-69. Canasta de Ejim y de manera sorprendente, había partido. Shorts falla dos tiros libres y Perry, de manera sorprendente, se encuentra con la opción de un triple ganador que, por supuesto, desaprovecha.