El Baskonia vuelve a tropezar en una semana nefasta

El equipo vitoriano visitó esta semana dos de las canchas más calientes del continente. El Zalgirio Arena, con 16.000 espectadores, abrumó de nuevo a un conjunto que ha perdido tensión competitiva en los últimos días. Sedekerskis, muy motivado en su país de origen, saltó en el quinteto inicial pero el que mostró molestias físicas y un porcentaje de tiro paupérrimo en la primera parte fue Markus Howard, que se echaba continuamente la mano al muslo. Y eso que los vitorianos empezaron con buen pie (7-11, min. 4).

Marinkovic comenzó certero en ataque pero Howard fallaba compulsivamente. Curiosamente, consiguió su primer tapón de la historia en Euroliga. Lo hizo sobre Giedraitis. Con el 9-15 pintaban oros pero luego hubo un parcial en contra de 14-2. Ulanovas y Hayes percutían sobre la canasta vasca. También un Evans que fue de menos a más. El 25-17 del final del primer cuarto auguraba una bronca de Ivanovic ya que el conjunto vitoriano estaba en una proyección de recibir cien puntos al final del partido. Mucho lituano en las gradas pero también bastantes estonios apoyando a Kotsar y Raieste. El primero jugó poco y el segundo, nada.

En el minuto 12, el partido ya iba ya 32-21. Matt Costello era el jugador que mantenía a su equipo en ataque pero no había fluidez. Ni Miller-McIntyre ni Theodore encontraban la manera de hacer jugar a sus compañeros. El entrenador montenegrino incluso lo intentó con Chiozza pero ni por esas. Muchas pérdidas, rebotes ofensivos concedidos al rival e incluso problemas para sacar de fondo en alguna ocasión. Con el 45-30 ya se encendió la señal de alarma. La máxima llegó a ser de 16 abajo, con el 48-32 pero Codi hizo una canasta final sobre la bocina. Todos a vestuarios y a reflexionar. Había muchas cosas para mejorar, el nivel había sido pobre.

El Baskonia arrancó el tercer periodo con un 0/9 en triples. Tampoco es que el Zalgiris (4/11) estuviera dando lecciones pero, por lo menos, demostraba más implicación, intensidad y acierto. El primer triple del equipo vasco llegó en el 22, con un lanzamiento acertado de Howard. Luego llegarían dos de Marinkovic pero el serbio se echó la mano al muslo por una lesión muscular. El conjunto de Ivanovic se acercó a los 6 puntos (52-46) aunque el rebote era báltico y, además, los árbitros castigaban muy poco los contactos y las faltas. Butkevicius, poco atinado desde lejos durante la temporada, estuvo muy acertado este noche y el tercer cuarto finalizó en tablas.

Cuando parecía que Ivanovic no volvería a contar con Marinkovic, el serbio regresó al partido, pero ya era tarde. Howard fue a más y lo máximo que inquietó el conjunto vasco al verde fue con el 75-65 del minuto 34. En un abrir y cerrar de ojos, los de Trinchieri recuperaron la iniciativa y se pusieron 19 arriba con el 84-75, un minuto después. Ecuador de cuarto final y rozando la veintena. Labor imposible, segunda derrota de la semana y a jugársela de verdad el jueves de la semana próxima contra el Efes en Vitoria. Si se pierde, podría ser la última cena. Las máximas en contra llegaron con el 86-66 y el 92-72, con una capacidad de reacción inimaginable ya.

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