El Baskonia se la jugará en El Pireo tras acribillar al ASVEL

El choque contra el ASVEL vino precedido por el resultado de Kaunas. El triunfo de los verdes ante el Maccabi no era buena noticia. Metía presión al equipo de Peñarroya, que ya no jugaba para clasificarse sino para no perder la estela de los bálticos. Minutos más tarde se confirmó que el Anadolu se estrellaba con el Fenerbahçe, por lo que los del Buesa tendrán que ganar al Olympiacos en Grecia. En caso de perder, tiene que esperar la misma suerte para el Zalgiris, al que gana en el average particular.

Los vitorianos afrontaron el partido con la baja de Sedekerskis, que sigue con problemas de aductor. Ni Diot, ni Lauvergne viajaron a la capital alavesa al estar lesionados. Incluso el entrenador, T.J. Parker, estuvo a punto de quedarse en el hotel debido a un proceso febril. El choque arrancó con un triple de Marinkovic, el jugador más inspirado del Baskonia en las últimas jornadas. Kahudi respondió desde la misma distancia para colocar el 3-3. Los alaveses estaban inspirados en ataque y, para el minuto 5, ya ganaban 19-11 con Thompson con 9 puntos.

El 25-15 auguraba una noche tranquila pero Mathews empezó a castigar el aro local y aproximó a los suyos. En el segundo acto, Peñarroya utilizó la Unidad B y eso permitió el acercamiento francés. Las diferencias se movían en torno a los 5 puntos en un duelo en el que los ataques se imponían claramente a las defensas. Con el 55-47, el Cazoo llevaba 7/14 en triples. Pero concedía mucho a su rival y, de hecho, un Mathews muy inspirado se fue a los vestuarios con 17 puntos en su cuenta particular.

Fall cometió su cuarta falta personal nada más comenzar el tercer periodo. Su alternativa, Tyus, no parecía un hombre capaz de frenar a Kotsar y Enoch (75-61, min. 25). De Colo demostró su maestría y mantuvo a los suyos dentro del partido. Lo curioso era que el Baskonia se ponía las botas con los triples pero firmaba un porcentaje pobre en los tiros libres. Los de Peñarroya consiguieron 33 puntos en el tercer acto y, para entonces, sumaban 25 asistencias durante el partido, una barbaridad con diez minutos por jugarse todavía.

La quinta de Fall al arrancar el cuarto final desactivó las opciones interiores del ASVEL. Del 90-75 se pasó al 95-85 pero, desde una técnica decretada sobre De Colo en el tercer cuarto, Parker no volvió a sacarle a la pista. Los últimos minutos fueron de fuegos artificiales. Punto 100 para Kotsar que tendrá que pagar pizzas a sus compañeros, récord de anotación del club vasco en Euroliga con 120 puntos, 33 asistencias al terminar el choque y un Thompson, de nuevo, con 36 de valoración, 23 puntos y 12 asistencias. Pasaporte para soñar la semana próxima: el Baskonia juega en El Pireo y el Zalgiris, en Múnich.