El Baskonia se complica la vida en Belgrado
Tropiezo inesperado ante el Estrella Roja de Ivanovic. Campazzo y la dureza local, sin respuesta vitoriana.
Tropiezo inesperado del Baskonia en Belgrado ante un Estrella Roja que no se jugaba nada. Al cuadro vitoriano le llegan ahora tres partidos consecutivos en casa de los cuatro que restan y cerrará la fase regular ante un Olympiacos que tal vez para entonces no se juegue nada. Hay varios perseguidores al acecho e incluso el Zalgiris le puede sacar esta jornada del Top-8. Da la sensación de que le harán falta tres victorias para sellar el pasaporte a la siguiente fase. Tal vez con ‘average’.
Ante Ivanovic y su tropa, un mal segundo cuarto, en el que el Estrella Roja endureció mucho el partido, dejó a los vitorianos sin opciones. Estos no supieron igualar el listón físico. Muchísima dureza consentida por los árbitros, pero eso se veía venir. Campazzo empezó a hacer de las suyas y Nedovic mostró toda su clase en ataque. Vildoza cayó lesionado. Thompson y Giedraitis se salvaron de la quema en una tarde con 19 pérdidas. Peñarroya aludió al “peor partido en ataque de la temporada”.
Puede decirse que el equipo del Buesa se bloqueó. Su fabuloso ataque, el mejor del Viejo Continente, quedó hecho añicos. Volvió a estar desacertado desde la línea exterior y no encontró respuesta desde un segundo cuarto que marcó el resto del partido. Solo seis triples anotó y, a pesar de un gran inicio de partido, los azulgrana no aguantaron la presión en campo propio de los balcánicos. Los errores de los serbios dieron esperanzas, pero todo se fue al garete con 10 minutos con solo tres puntos entre el segundo y el tercer cuarto, momento en el que se cocinó el pulso para los locales.
Los azulgrana arrancaron con un sólido 0-7, que contrarrestó el conjunto local con la conexión Campazzo-Martin y un ritmo endiablado del que se contagiaron los dos equipos. Los ataques mandaban sobre las defensas, aunque la precipitación ofensiva balcánica permitió imprimir velocidad a los alaveses, que mantuvieron la renta leyendo las ventajas en los emparejamientos defensivos. El Estrella Roja no acertó con los tiros liberados y el Baskonia, que mantuvo su ritmo anotador, lo aprovechó para abrir el primer hueco importante al inicio del segundo asalto, 23-35.
La presión de Campazzo sobre el puesto de base desconectó a los baskonistas y los contragolpes locales colocaron un parcial de 14-0 para voltear el marcador. Los vitorianos acumularon 7 minutos sin anotar, fruto de la presión de los locales, que defendieron al límite ante un Baskonia descabezado sin Thompson en la dirección, que sufrió con ocho pérdidas. Un triple de Howard rompió la sequía anotadora de los azulgrana. Pero la pólvora no se secó tras el paso por vestuarios, el Baskonia tardó más de tres minutos en estrenarse en la segunda parte y recibió un 11-2 de inicio. Campazzo, sin anotar, seguía marcando el nivel defensivo y provocó la desconexión total de los hombres de Peñarroya que sufrieron en el rebote con la actividad de Bentil y Mitrovic. En medio del caos y los numerosos errores, el público enloqueció por un triunfo de altura.