El Baskonia gana y reafirma el ‘average’ con los de El Pireo

Partido especial por los números y por otros detalles. Se trataba del choque 300 del Baskonia como local en la Euroliga mientras que Dusko Ivanovic sumaba su presencia 750 como responsable del banquillo alavés. Además, un par de horas antes trascendió el fallecimiento de un periodista legendario que siguió, en su día, la información del equipo de baloncesto. Se trataba de Paco Criado, de Villalón de Campos pero residente durante toda su vida en la capital alavesa. Nos dejó a los 56 años de edad después de sufrir un ictus a principios de 2024. No se hablaba de otra cosa antes del duelo en los pupitres de prensa.

El Olympiacos que jugó en el Buesa no se parecía nada al del choque de ida porque recuperó a algunos jugadores que estaban lesionados aquella noche y además ha incorporado recientemente a Petrusev. El juego interior, uno de los problemas de los vascos en la presente temporada, iba a ser claramente examinado en el Buesa ante numeroso público. Sorprendió la presencia en el quinteto local de Chiozza y Dani Díez. El partido comenzó a base de triples, de tres en tres, los dos conjuntos. La primera de 2 la hizo Sedekerskis pero luego le acompañaron otros componentes del club como Vanja Marinkovic (10-6, min. 6).

La valoración inicial en el primer tiempo muerto, de televisión, era de 17-1. Walkup se cargó de faltas muy pronto y, con la segunda, se tuvo que ir al banquillo. Con el 11-9, el Olympiacos sólo había anotado de tres puntos, algo muy extraño. Ni de 2 ni de tiros libres. Pero Canaan se ponía las botas y firmaba una gran serie consecutiva de triples en el Buesa. Fue cuando Dusko Ivanovic tiró de cuatro pequeños y dio entrada en el partido a Codi Miller-McIntyre. El hombre más alto era un Matt Costello que suele acostumbrar a abrirse mucho. El primer cuarto terminó con un 14-17.

Los griegos siguieron con buen paso (17-21, min. 13). Más de un centenar de aficionados griegos apoyaban a los rojiblancos en las gradas. Pero Howard consiguió dos triples terapéuticos cerrando un parcial de 8-0 y poniendo a los de Ivanovic, de nuevo, por delante. El parcial corrido fue de 14-3 y a los del Pireo les sostenía su juego interior, bastante superior al local. Un tirón final de los helenos estrechó las diferencias demostrando que el partido era una auténtica montaña rusa. Al descanso se llegó con un 33-32, marcador bastante bajo, guarismos que suelen favorecer a los griegos. Muy bien Petrusev y Milutinov.

Los de Ivanovic empezaron a abrir brecha en la tercera entrega (45-40, min. 26) pero, inicialmente, las diferencias eran totalmente salvables para el conjunto de Bartzokas. Se mejoró en defensa, rebote y efectividad. Al final de ese periodo se alcanzó la distancia de diez puntos. Los máximos anotadores eran Markus Howard (12) y Chima Moneke (11) pero también aportaban otros efectivos como Kotsar (enorme en el tercer acto), Dani Díez o Tadas Sedekerskis, un jugador que tiene una oferta de renovación encima de la mesa y que se la sigue pensando. No tiene prisa en contestar porque le llegarán otros ofrecimientos desde toda Europa. El tercero fue el cuarto del despegue definitivo, con un parcial de 26-17 favorable a los azulgranas.

En el Olympiacos, la producción la firmaba Canaan, sólo acompañado un poco por Milutinov y Petrusev. Un poco también de Fall. Alec Peters, que lleva una gran temporada, estuvo bastante desdibujado en su segunda visita al Buesa tras dejar el club alavés hace dos años. Con el 70-53 del minuto 34 el Baskonia se aproximó definitivamente hacia la victoria. Hubo algún acercamiento visitante (73-62, min. 37) pero resultó insuficiente a fin de cuentas. Triunfo y average particular ante un equipo que puede andar en un balance similar al final de la fase regular. En Atenas se ganó, así que dos de dos.

Clasificación de 11 triunfos y 10 derrotas en Euroliga para los de Dusko Ivanovic, que recibió una placa de reconocimiento del club. Se la dio Félix Fernández, el Director Deportivo, que comenzó con él como delegado en un torneo amistoso en Eslovenia. El sábado se viaja a Manresa para jugar contra el Baxi. Pedro Martínez alcanza su partido mil y Chima Moneke regresa a una cancha en la que se le adora. Ante el Olympiacos, de nuevo, hizo un gran partido. También Kotsar y Howard, letal en el último cuarto.

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