El Baskonia gana en la prórroga a un sensacional Betis

Semana redonda en el Buesa Arena. El Cazoo Baskonia ganó al Maccabi el jueves (116-87) y remató la faena contra un Betis espectacular. Sin Shannon Evans, Rodions Kurucs, ni Eulis Báez pero con un gran trabajo coral, metió a los vitorianos contra las cuerdas. Georgios Tsalmpouris, que hizo un partido sensacional, falló el triple final. La prórroga la ganaron los alaveses pero el conjunto sevillano dejó un fabuloso sabor de boca en Vitoria.

Sorprendió la entrada de Dani Díez y Sander Raieste en el quinteto inicial pero lo cierto es que a Peñarroya le salió bien esa apuesta. No había trascendido pero la realidad es que Darius Thompson no estaba en condiciones de jugar. Pierrià Henry funcionó muy bien en la dirección con un Kotsar desequilibrante. El partido tenía un ritmo muy alto y terminó con un 23-20 al final de los primeros diez minutos.

Después de un parcial de 1-15 en marcador corrido, el Betis empezó a meter el miedo en el cuerpo a los vitorianos. Sylla se ponía las botas poniendo tapones y Tsalmpouris parecía Antetokounmpo, su compañero de selección. Defensa, rebote, bote, lanzamiento de media distancia y control de la pintura (27-34, min. 14). Un buen estirón final de los baskonistas, con un parcial de 13-2, dejó el luminoso al descanso con un 40-36.

Para entonces, el más valorado era el griego, con 17 puntos y 16 de valoración, seguido del estonio Kotsar, con 15 puntos. Pi Henry ya apuntaba a buenos números (terminaría el choque con 12 asistencias) aprovechando la ausencia de Darius Thompson al que Peñarroya quiso dar descanso. El que tenía molestias en la rodilla y jugó muy poco fue Hommes. Esa circunstancia la aprovecharía muy bien, en el tercer cuarto, Jeremiah Hill.

Pero el base bético se cargó muy pronto de faltas, al igual que su homónimo Markus Howard. El partido se abrazó a 44 pero el base estadounidense encadenó tres triples consecutivos (57-51) y luego sumaría otro más. Fue un momento de crisis andaluza que luego corregiría el equipo de Luis Casimiro con una gran actuación de Pozas y de BJ. Johnson. Un triple de ese último dejó el marcador en empate a 66 a falta de los diez minutos finales.

Nzosa saltó a la cancha y tuvo minutos. Está cedido por el Unicaja. El choque se igualó con varios guarismos parejos (77-77, 82-82, 89-89) y, al final, se fue a la prórroga. En los últimos segundos del cuarto final, Hill consiguió anotar tras una buena penetración y, a falta de casi tres segundos, Matt Costello se fue al tiro libre. El primero lo falló y el segundo entró después de tocar el aro hasta tres veces. Consecuencia, cinco minutos más tras el 91-91.

El propio Costello, que casi condena a los suyos, hizo los cuatro primeros puntos de su equipo en el tiempo suplementario. Se daba una situación realmente curiosa, más de balonmano que de baloncesto: Howard sólo jugaba en los ataques y se sentaba a la hora de defender. Después de un intercambio de canastas, con idas y venidas, Tsalmpouris se jugó el triple definitivo. Se puede ir tranquilo a dormir. Partidazo el suyo, sobre todo en los dos primeros cuartos y con dos triples en la prórroga. También destacaron Hill y BJ. Johnson.

En sala de prensa, Casimiro, que recibió una técnica al inicio del cuarto cuarto, se quejó de la última falta en el tiempo reglamentario sobre Costello. “Ha sido flopping, no se puede pitar eso”, aseguró. Por su parte, Peñarroya comentó que “lo mejor de hoy ha sido la victoria. Hemos jugado sin tensión”. La semana ahora tiene un solo compromiso para los baskonistas, el viernes contra el Panathinaikos en Atenas. El fin de semana no hay Liga ACB.