El Barça vence y convence

Tras tres derrotas consecutivas algo tenía que cambiar el Barça para volver a la senda de las victorias, más si cabe ante un rival de la entidad de Baskonia, y lo hizo de forma decidida. Ganaron con muy buenas sensaciones, con un cambio radical en actitud e intensidad defensiva, jugando como un buen equipo. Fueron muy agresivos cortando líneas de pase, fuertes atrás y cerraron el rebote. Pero la mentalidad, el convencimiento y las ganas de los de Grimau fueron otras. Las necesarias para ganar y convencer, para acercarse más a lo que quiere su técnico. Para minimizar a Baskonia. Destacaron Willy, Jabari o Jokubaitis, falló bastante Laprovittola, ante un equipo donde sólo sumó Howard. Remó prácticamente solo el norteamericano en ataque, donde echaron de menos las últimas y muy buenas actuaciones de Moneke. El Barça les pasó por encima.

De entre todos los problemas que arrastra el Barça estaba bastante claro que el ataque no era el principal. Mejor equipo en ataque estático, mejor equipo tirando de tres y la sensación de tener un potencial ofensivo considerable. Pues bien, ante Baskonia, metió uno de los primeros diez lanzamientos de campo. Un 3-11 de inicio, con Howard activado, que obligó a Grimau a parar el partido. Y tuvo el efecto deseado. Desde la defensa, el talón de aquiles de esta temporada, el Barça fue creciendo, sin Moneke en pista (sufrió un problema físico que no fue a más), hasta el 15-14. La vuelta de Howard al parqué, con un triple inverosímil, volvió a situar a los de Vitoria por delante al acabar el primer cuarto.

Pero más allá del resultado, apretado al inicio, fue evidente que el Barça jugó ante Baskonia con otra actitud. Tras tres derrotas consecutivas, no tenían otra opción. Vesely, inteligente siempre, cargó de faltas a los interiores de Baskonia mientras que Jokubaitis dotó de más ritmo al equipo. Movieron el balón rápido y con Brizuela y Parra en pista le mantuvieron el pulso a los vascos. Se parecieron más al equipo que quiere su técnico.

Se vio por otro lado a un Baskonia más obligado. Más impreciso, con Moneke desacertado y dependiendo en exceso de Howard. Incapaces de frenar las transiciones del Barça. Tampoco les entraron los triples y la diferencia creció (31-25). Anotaron dos puntos en cinco minutos. Mejoraron en la segunda mitad del cuarto, pero llegaron al descanso por detrás. Dos triples de Moneke, sin embargo, limaron las diferencia (37-34).

La salida de vestuarios fue arrolladora por parte del Barça. Un parcial de 13-0 con el acierto de unos y los fallos del otro. Baskonia se vio superado ante un Barça agresivo en los cambios y solvente en ataque, que dilapidó buena parte de las opciones en el partido. Los de Ivanovic botaron demasiado, tiraron mal y no encontraron soluciones. Sin Howard son otro equipo (50-35). Tuvo que salir para que su equipo volviera a sumar. Willy, además, les castigó mucho bajo el aro.

El partido estaba ya roto en los últimos diez minutos, con el Barça dominando con solvencia en el parqué y el marcador. Se llegó a la máxima del partido a cuatro del final (79-49) ante la imposibilidad de Baskonia de anotar. Malos tiros, poco acierto y el partido listo. En defensa, más que tibios. El Barça jugó a placer, mejoró porcentajes de tres y cerró el rebote defensivo.

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