Gran CanariaCAN
83
Surne BilbaoBLB
75
Finalizado

LIGA ENDESA | 14ª JORNADA

El Gran Canaria aprovecha la crisis del Bilbao Basket

Los insulares retoman su carrera hacia la Copa ante un rival que volvió a arruinar sus opciones en un pésimo final.

Elvira Urquijo A.EFE

El Gran Canaria no tuvo más que ser paciente y esperar al tramo final de la velada para doblegar a un Bilbao que llegó a la isla bajo sospecha y cumplió su tradición. Un punto en los cinco minutos definitivos de los vizcaínos engrasó el triunfo amarillo, apoyado en el reparto de juego de Bassas, con 12 asistencias. Tras dominar todo el partido, el Surne dejó pasar un 71-75 a 3:03 para acabar. No anotó más y acabó hundido. Lleva una victoria en las nueve últimas jornadas. Parece mentira: se ve pletórico en Europa y en realidad ahí compra la kryptonita para ser de lo más vulnerable en la ACB. Lakovic dijo: “Creímos hasta el minuto 40″. ¡Cómo para no hacerlo ante un enemigo que se comporta como un espantapájaros en los instantes del cara o cruz! Acaban con ciertas dudas tras el hipo ante Madrid y Ulm.

El Granca retoma su carrera hacia la Copa, con un encuentro que era crucial. Happ y Pelos mostraron toda esa determinación en el sorbo final que le faltó al rival. El dominio en el rebote mantuvo en el encuentro al conjunto de Lakovic, que no podía frenar a Killeya-Jones. Brussino era el principal sustento ofensivo, aunque cometió faltas muy pronto y tuvo que ir al banquillo. El Bilbao tiene como un botón de apagado que se activa de forma automática cuando alcanza la decena de puntos de ventaja. Smith, su líder, está en una crisis galopante y el grupo no entiende en ocasiones la dureza necesaria para consolidar sus ventajas. Además, cada vez protege peor la pelota y sus pérdidas le condenan.

En un arranque fulgurante e intenso, el conjunto vizcaíno tomó la iniciativa aprovechando el juego físico de Killeya-Jones y la movilidad de De Ridder en la pintura (11-13 en el ecuador del primer cuarto). Pero la segunda unidad falló esta vez de forma lastimosa. El acierto de Albicy y la reserva insular fueron otra cosa.

Anderson y Rabaseda estiraron el chicle hasta el 14-20. En el segundo periodo, el Gran Canaria cambió el chip, primero con un ‘alley-hoop’ fraguado por Bassas y ejecutado de espaldas por Lammers, que luego se vio acompañado de un triple lejano de Salvó y otro de Shurna (27-25), quien reaparecía en Liga Endesa tras recuperarse de su lesión. Da la sensación de que el bueno de Lammers, bien conocido por el Bilbao y de regreso a la ACB desde Alemania, está infrautilizado por Lakovic. Su ‘timing’ a la hora de ir a taponer es de lo mejor en Europa.

RESUMEN

83 - Dreamland Gran Canaria (19+23+17+24): Slaughter (4), Albicy (7), Brussino (19), Pelos (12) y Happ (14) –quinteto titular-; Bassas (2), Salvó (7), Landesberg (5), Shurna (3) y Lammers (10).

75 - Surne Bilbao Basket (25+18+23+9): Smith (9), Killeya-Jones (17), De Ridder (10), Renfroe (6) y Rabaseda (4) -quinteto titular-; Andersson (5), Reyes (10), Pantzar (4) y Kullamae (3) y Tsalmpouris (7).

Árbitros: Benjamín Olivares, Afonso Olivares y Yasmina Alcaraz. Sin eliminados.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la décimo cuarta jornada de la Liga Endesa, disputado en el Gran Canaria Arena ante 5.342 espectadores. En el descanso se llevó a cabo la campaña de recogida de peluches en el centro de la pista, lanzados por los aficionados congregados el encuentro.

El Surne seguía enchufado y retomó la iniciativa con un 2-13 de repunte, protagonizado por Kullamae y Reyes (29-38), aunque no cuajaron un partido muy allá, especialmente el estonio, que completó una mala noche en el flamante Gran Canaria Arena. Más tarde saltarían a la palestra Happ y Brussino para enderezar el rumbo claretiano a 3:26 para el descanso (36-38), propiciando el tiempo muerto de Ponsarnau. El ritmo no aminoró tras la pausa táctica, si bien el Bilbao supo mantenerse en vanguardia con el tiro exterior de Renfroe y la movilidad de Killeya-Jones, mientras Albicy y Brussino ajustaban la diferencia al mínimo (42-43).

En la reanudación se multiplicaron los errores y los fallos en el porcentaje de tiro en ambos aros, estancándose los guarismos de manera notable y aprovechando la circunstancia una vez más el omnipresente para emerger en la zona (47-51). Al fin apareció Smith, en blanco durante 25 minutos: encontró dos triples, asumió los galones del Bilbao en ataque y estiró la ventaja al 51-62. Y, como siempre, empezó a hacerse de noche para los vizcaínos, que ya no encontraron a su mejor faro, Killeya-Jones. Hlinason viajó y reposaba en el banquillo, pero prefirió no forzar para no estropear su tobillo izquierdo ahora que casi está recuperado. Bassas leyó el juego de cine, Lammers fue creciendo y hasta apareció Landesberg. Pelos se sumó a la fiesta, mientras Renfroe se dolía de la espalda y dejaba de producir. No acabaron de adaptarse a la dureza que imperaba y el criterio arbitral que la consentía. Otro final lleno de impotencia, con muerte en la orilla tras remar como posesos. Y fiesta por todo lo alto en Las Palmas.

Lakovic: “Creímos hasta el final”

Lakovic elogió el rendimiento de su equipo . manifestando que “ha sido una victoria de mucho mérito, en la que los jugadores han sabido creer en ella para sacarlo adelante, cuando el rival ha sido, durante gran parte del choque, mejor” que su equipo. “Ha sido una gran victoria ante un rival que ha jugado muy bien, que ha anotado canastas imposibles y que han estado dominando durante gran parte del encuentro. La defensa en el último cuarto ha sido muy importante para seguir en la carrera por lograr un billete para la Copa del Rey”, aseveró el técnico esloveno.

El estratega esloveno agregó: “Hemos ganado sufriendo. Y creo que ha venido bien al equipo, porque no habíamos tenido partidos así en los que habíamos sentido ese sufrimiento. Esa urgencia y presión que te permite sacar lo mejor”. “Las dos derrotas anteriores no nos han llegado a confundir ni afectar en lo anímico. Más bien los tres viajes que hemos hecho, ya que volvimos el miércoles por la tarde. Algunos jugadores les ha influido y se ha notado que falta un poco esa explosividad en las piernas, pero la clave ha estado en la mentalidad, en creer en la victoria”, dijo.

Con respecto a la vuelta del norteamericano Shurna a la Liga Endesa -ya había retornado esta semana a la Eurocup- tras su lesión, el preparador amarillo reconoció: “Tras casi ocho semanas de ausencia, siempre se necesita rodaje. Es mucho tiempo de convalecencia para un deportista de élite. Creo que ha tenido muy buenos momentos y es normal que aun siente que no tiene el ritmo de juego habitual, pero creo que poco a poco volverá a su habitual versión”.

En cuanto a la situación clasificatoria, Lakovic dijo: “La liga es una locura. No hay resultados esperados ni ‘lógicos’ cada jornada. Por algo es la mejor de Europa. Hay muchos equipos en la carrera para clasificarse para la Copa y las cuentas, parecen bastante claras. Hay que ir a por las 10 victorias. Otros milagros pueden haber pero esa es la cuenta simple”.

Por último, Lakovic no quiso entrar en polémica respecto a las quejas arbitrales esbozadas por el técnico del Surne Bilbao, quien aseveró en la sala de prensa que su equipo “no ha sabido adaptarse al criterio arbitral de los colegiados”. En este sentido, recordó: “También recuerdo después del derbi que estuve pidiendo respeto por mis jugadores y que sentía no estaban siendo lo suficientemente respetados. Jaume (Ponsarnau) está haciendo un gran trabajo, pero yo creo que el triunfo de hoy no es fruto del arbitraje. Los colegiados de esta liga cometen errores como todos, pero son muy buenos; diría que los mejores de las ligas europeas”.

Ponsarnau: “Estamos en el buen camino”

Ponsarnau elogió el esfuerzo de su equipo pese a la derrota y destacó que sus jugadores estuvieron “consistentes y jugando con buena mentalidad”, si bien también resaltó la labor de los colegiados afirmando: “no nos hemos podido adaptar al criterio arbitral de los colegiados”.

“Estoy muy satisfecho por el partido. Hemos estado consistentes en el inicio y, aunque el rival nos ha puesto muchas dificultades, muchos jugadores nuestros han sumado en este encuentro. Pero al final del segundo cuarto y en la recta final del partido está lo reprochable”, agregó.

A su juicio, y “sin quitar mérito al Gran Canaria”, aseveró: “No hemos estado acertados en esos últimos instantes. Vamos a seguir trabajando para sacar nuestras mejores opciones, pero esa permisibilidad arbitral nos ha afectado”. En cuanto a la superioridad del rival en el rebote -43 frente a 26 del conjunto vasco-, el técnico catalán incidió: “Más que por los rebotes ofensivos que ha firmado el rival, sobre todo lo que más echamos en falta era una mayor presencia en el defensivo. Pero en general no tengo nada que reprochar a los jugadores. El Gran Canaria es un equipo más físico que nosotros”.

Finalmente, Ponsarnau analizó la situación clasificatoria de su equipo y subrayó: “El baloncesto te da y te quita constantemente. A veces te da la sensación, como en este partido, que nos ha quitado. Seguiremos trabajando por ese primer objetivo que no es otro que lograr la permanencia. Por supuesto, hay cosas que mejorar. Pero sinceramente, creo que estamos en el buen camino”.

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