Una mujer de 36 años vende su casa para vivir su sueño en una casa rodante de 43.000 dólares: “Fue algo muy impulsivo”

Son muchas las personas que, eventualmente, se plantean su vida y si la rutina constante en la que viven es la forma correcta de afrontarla. Una de esas personas era Ashley Kaye, una estadounidense de Wisconsin que en el año 2015 perdió a su padre, heredando ella la casa de su infancia, y a partir de ese momento comenzó a pensar: “¿De verdad quiero vivir aquí para siempre?“, dice en declaraciones a ‘CNBC Make It’.

Ashley ya había viajado, y “sabía que quería seguir viajando cada vez más”. Una persona que trabajaba en el sector sanitario corporativo, pasando después a un trabajo de consultoría que le ocupaba entre 80 y 100 horas a la semana: “Trabajaba desde casa, así que solo iba de mi dormitorio a mi oficina y a la cocina, y así sucesivamente. En aquella época era un zombi”.

a

Fue en un viaje a Honduras cuando conoció a alguien que viajaba a tiempo completo, y en ese momento se dio cuenta de que quería dejar atrás su carrera laboral y emprender una vida viajera. En el momento que dejó su trabajo, Kaye tenía unos 37.000 dólares ahorrados, pero le fue muy complicado esos primeros meses en los que un trabajo no ocupaba su tiempo, pese a todo, “una vez que cogí el ritmo de viajar y gané confianza gracias a esa experiencia, nunca miré atrás y no me arrepiento en absoluto de haberlo dejado".

Viajar en furgoneta le ha permitido ir a lugares a los que nunca habría ido. Un vehículo que consiguió tras vender su casa, un Toyota Tacoma que compró por unos 43 mil dólares. Ya ha viajado por más de 20 países, decidiendo recorrer la Carretera Panamericana, arrancando en Denver y con el objetivo de llegar hasta Ushuaia, Argentina.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí