SOCIEDAD

Una española cambia de país solo para hacer la compra en el Mercadona

La usuaria de TikTok ha publicado un vídeo en el que muestra una compra de 386 euros y dos carritos completamente llenos: “Que el ahorro nos acompañe”.

Analucena64/TikTok

Hay amores que duran lo justo y necesario. Otros que se prolongan demasiado, pero también los hay que fueron más cortos que el verano y dieron paso a otras pasiones estivales. Hay amores por los animales, hay quien siente amor por las flores, por la comida de su abuela, por una camisa, por un jugador de fútbol. A todos estos los superan los enamorados del Mercadona.

En los tiempos que corren, con una crisis energética que encarece el precio del carburante, encabeza la lista de los apasionados aquella persona que viaja entre países para poder comprar guacamole del Mercadona, churros congelados o incluso la navaja suiza culinaria del pollo kebab. De España a Francia y de Francia a España con un solo objetivo: llenar la nevera y el corazón.

Hablamos del caso de la usuaria de TikTok analucena64, que, como hace cualquier apasionada, ha publicado un vídeo con su amor. En él, explica que, a pesar de vivir en Francia, ella sigue viajando a España solo para comprar en el supermercado de Juan Roig. Entendemos que vive cerca de la frontera entre ambos países. Si no es así, que se prepare cualquier historia de amor contada desde un Alsa: ningún amor fue mejor que el de Ana y el Mercadona.

En el vídeo, la usuaria muestra el ticket. Ha acudido a comprar al Mercadona de Vielha e Mijaran, un municipio de Lleida de unos 5.500 habitantes. Cuando quieres a alguien, te gusta hasta el último detalle de esa persona: Toallitas para bebés, gel de vainilla, cerveza, lambrusco, infusiones para dormir, espinacas, hamburguesas… El amor es ciego. Tan ciego, que la usuaria no dudó en dejarse 386 euros en su pasión.

Golpe de realidad

Sin embargo, el vídeo es tan verdadero que muestra los claroscuros que tiene una relación. Tras mostrar todo lo que ha comprado, en la descripción de la publicación aparece la siguiente frase descorazonadora: “Que el ahorro nos acompañe”. Mercadona, que sentía verdadera admiración por Ana, acaba de percatarse que su amor era un simple arreglo económico.

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