Se pone a conducir a 147 km/h, la Policía le confisca el carnet y su madre acaba ante la Justicia: “Consiste en aprender a proteger”
El joven y su madre se enfrentan ahora a serios cargos que podrían implicar la pérdida de puntos de carnet y la confiscación del vehículo.
La “conducción supervisada”, aprobada en Francia y otros países europeos, permite a miles de jóvenes poder coger un coche sin tener aún el carnet de conducir, siempre y cuando vayan acompañados de un adulto con carnet que haga el papel de supervisor. Si bien existen limitaciones que previenen la seguridad vial entre estos conductores acompañados, hay ocasiones en las que el supervisor no cumple con su papel.
La gendarmería francesa detuvo el pasado martes a un conductor por circular a 147 km/h en una zona de 80 km/h en una carretera departamental de La Neuveville-sous-Montfort, en Vosgos. Según informó el cuerpo policial en su cuenta oficial de Facebook, el conductor era un menor de edad que estaba al cargo de una conducción acompañada por su madre, quien hacía el papel de supervisora.
Madre e hijo fueron sorprendidos por un control de tráfico inesperado, que acabó con la detención del BMW de la familia y la confiscación del permiso de aprendizaje del joven de 16 años. La madre se enfrenta también a serias multas, según informó la gendarmería de Vosgos en redes sociales.
Pérdida de puntos y suspensión del carnet
El cuerpo de seguridad francés muestra su descontento sobre lo sucedido a través de su cuenta de Facebook, recordando a los ciudadanos que “la conducción supervisada consiste en aprender a proteger, no a correr riesgos”. “Otro acto de comportamiento que podría haber costado una vida”, añaden en su publicación.
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Ahora, la familia se enfrenta a una series de multas. La gendarmería francesa procedió en el momento de la detención del vehículo a la retirada del permiso de aprendizaje del joven de 16 años y se arriesga a ser multado con una suspensión de circulación de hasta 3 años. La madre, “cuya función era velar por su seguridad y enseñarle a ser prudente”, comenta el cuerpo francés, se arriesga a la pérdida de seis puntos del carnet, la suspensión del permiso de conducir por 3 años y la confiscación del vehículo, que ya ha sido inmovilizado.
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