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Muere Paul Alexander, el hombre del “pulmón de acero” a los 78 años

Paul Alexander contrajo la poliomielitis cuando apenas tenía seis años. Se desconoce la causa de muerte, pero fue hospitalizado hace tres semanas por una infección de Covid-19.

El estadounidense Paul Alexander, quien pasó más de siete décadas en un pulmón de acero, ha fallecido este pasado lunes a la edad de 78 años. Aunque se desconoce la causa de muerte, se sabe que Paul fue hospitalizado hace tres semanas por una infección de Covid-19. A pesar de que esta semana ya daba negativo, su estado de salud se vio seriamente comprometido por el virus.

Su muerte se anunció el martes en una página de GoFundMe creada para ayudar a pagar los gastos del paciente, tales como su vivienda y atención médica, según informa la CNN. “Es absolutamente increíble leer todos los comentarios y saber que Paul inspiró a tanta gente. Estoy muy agradecido”, aseguró su hermano Philip Alexander, quien informó sobre la muerte.

En marzo de 2023, Paul recibió el título de paciente con pulmón de acero que sobrevivió más tiempo en el mundo, recogido en el Libro de los Récords Guinness. Ahora, los fondos recaudados a través de la página web ahora irán destinados a gastos funerarios, proporcionando consuelo y ayuda a la familia en estos momentos difíciles.

Poliomielitis a los 6 años

Paul contrajo la poliomielitis en 1952, cuando tenía tan solo seis años, y lo dejó con una parálisis del cuello para abajo, incapaz de respirar de forma independiente. Esta condición hizo que los médicos lo colocasen en un pulmón de hierro, es decir, un gran cilindro de metal que varía la presión del aire para estimular la respiración. Allí pasaría el resto de su vida.

“Hubo algunas ocasiones en las que falló la energía eléctrica y luego hubo que bombear el pulmón a mano. Nuestros vecinos corrían y nos ayudaban”, relató Doris Alexander, madre de Paul, en su autobiografía ‘Three Minutes for a Dog: My life in an Iron Lung’.

Superó todas las expectativas

Esto no frenó a Paul de vivir su vida con toda la normalidad que se le permitía, ya que se graduó en la universidad, obtuvo una licenciatura en Derecho y ejerció la abogacía durante treinta años. Además, aprendió técnicas de respiración que le permitieron salir del pulmón de hierro durante períodos cortos de tiempo.

Los médicos no esperaban que Paul llegase a vivir tantos años debido a su condición, ya que la mayoría de supervivientes de la polio veían considerablemente acortada su vida. Sin embargo, Paul superó todas las expectativas habidas y por haber y llegó hasta los 78 años de edad.

“Su historia viajó por todas partes, influyendo positivamente en personas de todo el mundo”, explica su hermano Philip. Asegura que será recordado siempre como un modelo increíble a seguir ya que, a pesar de su enfermedad, nunca dejó de luchar por sus sueños ni quiso tirar la toalla.

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