Malas noticias si decides subir a un avión con regalos de Navidad: estos son los objetos que pueden acabar en manos de aduanas

En España y en los aeropuertos europeos en general, las regulaciones fitosanitarias y de seguridad pueden complicar la tarea de transportar regalos, especialmente cuando estos incluyen elementos naturales o productos alimenticios que cruzan fronteras.

Adornos navideños elaborados con piñas de pino, ramas de coníferas o muérdago, por ejemplo, pueden estar sujetos a controles estrictos para prevenir la entrada de plagas o enfermedades que afecten al ecosistema comunitario, según el Reglamento (UE) 2019/2072.

Qué debes tener en cuenta al preparar tu equipaje

Un punto clave para los viajeros es la procedencia de los objetos naturales incluidos entre los regalos. Aquellos elementos recogidos en bosques, comprados en mercados informales o traídos de fuera de la Unión Europea pueden acabar confiscados si no cuentan con los certificados fitosanitarios necesarios o si su transporte está directamente prohibido por la normativa aduanera.

Los productos gastronómicos típicos de las cestas navideñas también están bajo vigilancia. Frutos secos, semillas, tubérculos y plantas vivas pueden requerir permisos específicos o estar sujetos a restricciones estrictas incluso dentro del espacio comunitario, dependiendo de su origen.

Los líquidos pueden dar problemas

Otro aspecto importante para quienes viajan con regalos es la normativa sobre líquidos y objetos voluminosos en el equipaje de mano. Aunque los detalles pueden variar según la aerolínea, las regulaciones de seguridad aérea limitan la cantidad de líquidos permitidos en cabina y, en muchos casos, obligan a que objetos como esferas de nieve con líquidos, velas de gel o decoraciones aromáticas viajen en el equipaje facturado o sean descartados si no cumplen los requisitos.

Además, los especialistas en viajes recuerdan que los regalos envueltos pueden ser problema en los puntos de control. Aunque no está prohibido llevarlos, los paquetes cerrados pueden ser abiertos por los agentes de seguridad para inspección, lo que puede arruinar la sorpresa antes de llegar a destino. Por ello se recomienda utilizar envoltorios semitransparentes o dejar los regalos “a la vista” hasta después de pasar por seguridad.

Conocer estas normas y prepararse con antelación puede ahorrar tiempo y evitar frustraciones en un momento en el que lo último que un viajero quiere es que un regalo quede retenido o confiscado en el aeropuerto.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí