¿Llevas esta pegatina en el coche? La DGT avisa de multas de hasta 200 euros

Todo conductor, pasados unos años desde la matriculación de su coche, debe pasar la Inspección Técnica de Vehículos (ITV). Ya sea de forma anual o bianual (en función de la antigüedad del coche), es obligatorio circular con la pegatina correspondiente que acredita haber superado de forma satisfactoria dicha inspección.

Un proceso por el que todo el mundo debe pasar, aunque no sea lo que más nos guste. “Ponga el intermitente izquierdo, el derecho, antiniebla trasera, delantera, luces largas”, retumba en nuestra cabeza mientras tratamos de pulsar el botón adecuado que activa cada orden del encargado de la ITV. Tener el coche a punto nos garantiza superarla con resultado favorable y así evitar gastar un dinero adicional en los ajustes necesarios para pasar la prueba.

Una vez recibido el papel que certifica que nuestro coche está en óptimas condiciones para la circulación (se puede obtener un resultado favorable pero con algún problema ‘leve’), nos entregarán la correspondiente etiqueta con la fecha en la que deberemos volver para pasar la ITV. Esta pegatina, conocida legalmente como V-19, se debe llevar en todo vehículo que circule por la vía pública. En caso contrario, la sanción va desde los 80 hasta los 200 euros.

Según establece el Reglamento General de Vehículos, la pegatina de la ITV debe ser colocada en el ángulo superior derecho del vehículo, mirado desde dentro del coche (es decir, en el lado del copiloto). De esta forma, aunque se trate de una pegatina de pequeño tamaño, se evita que pueda afectar a la visibilidad del conductor del vehículo.

Es importante pegarla en el parabrisas porque, aunque la tengamos en nuestro poder, no llevarla como marca el reglamento puede suponer una multa. Debe ser visible a simple vista en el cristal, si no, nos enfrentamos a una sanción de entre 80 y 100 euros, sin que haya pérdida de puntos. Y el hecho de perderla no servirá de excusa para librarse de la multa, pues se puede pedir un duplicado con la misma fecha de caducidad. Y en caso de no llevarla por no haber pasado la ITV cuando tocaba la multa asciende hasta los 200 euros.

No más de una pegatina

Es una estampa típica del parqué automovilístico español: muchos de los vehículos circulan con más de una pegatina de la ITV, toda una colección que se acumula en el lado del copiloto. Pero es algo que no se debe hacer, pues puede terminar afectando a la visibilidad del conductor. La ley no contempla una sanción por llevar más de una pegatina, pero sí el hecho de que pueda dificultar la visión, con la consiguiente multa de 200 euros.