Golpe al megaproyecto ‘The Line’: la ciudad de 170 kilómetros de Arabia Saudí, al borde del fracaso

Pausa, de momento, en el proyecto que parecía hacer magia en Arabia Saudí y convertir un desierto en una ciudad de cristal. Neom, The Line, pretendía demostrar la magnitud de la ambición urbanística del príncipe heredero Mohammed bin Salman de transformar Oriente Medio.

Tres años después de la presentación del proyecto, el sueño del líder saudí ha chocado con la realidad: los costes de las infraestructuras se han disparado, la inversión extranjera no se ha materializado de la manera que querían, y el proyecto de un billón de dólares de Riad se ha desvanecido como arena al medio día bajo el sol.

“Dicen que muchos proyectos que se están llevando a cabo en Arabia Saudí son inalcanzables, que son demasiado ambiciosos”, dijo el príncipe heredero en un documental de Discovery Channel sobre The Line. “Pueden seguir diciéndolo, pero nosotros seguiremos demostrándoles que se equivocan”.

Desde hace meses las dudas han llegado también a los arquitectos que trabajan en The Line: ¿la estructura podrá completarse, alguna vez, en la forma prevista? Tras una inversión de, al menos, 50.000 millones de dólares, el desierto está plagado de cimientos y zanjas que se extienden durante decenas de kilómetros, pero la primera fase del proyecto Neom no es ni mucho menos tan ambiciosa como fue planeada.

Las obras van lentas en todos los proyectos: desde la estación de esquí de Trojena, donde se suponía que se celebrarían los Juegos Asiáticos de Invierno de 2029, hasta el lujoso complejo turístico de Sindalah en el Mar Rojo, que fue cerrado poco después de su inauguración oficial.

Los problemas vienen ahora en otro punto: un exempleado declaró que todo el mundo sabe que el proyecto no se llevará a cabo, y que lo único que queda es encontrar la manera de que MBS lo entienda, según Financial Times. Las leyes de la física están jugando en contra, la inversión también, la falta de efectivo, la ciencia y los recursos.

Un dato, los equipos de construcción necesitarían una cantidad anual de cemento superior a toda la producción anual de cemento de Francia y “el 60% de la producción mundial de acero verde”, según un diseñador para hacer los primeros 16 km de un total de 170 km. Expertos consultados por medios internacionales afirman que para se hubiera llevado a cabo el desarrollo de la ciudad para 2030, se habría requerido un ritmo de entrega de materiales de construcción de un contenedor de 12 metros de largo cada ocho segundos, sin parar.

Un experto saudí en planificación urbana dijo que “The Line es un proyecto magnífico, pero no se pueden construir ejercicios de imaginación”. Sea como fuere, del mega proyecto se ha pasado a intentar terminar el puerto deportivo. Sin olvidar un detalle, menor, pero igual de importante y con mayores repercusiones, la ruta migratoria de millones de aves que migran desde Europa y Asia para invernar en África, incluyendo varias especies en peligro de extinción. “Si las turbinas eólicas no despedazan a los pájaros, se estrellarán contra un muro de 500 metros de altura”, dijo uno de los diseñadores.

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