Éxito en Valencia: nace una especie que estaba extinta

Hasta hace unos meses, la gacela Mhorr estaba catalogada “en peligro crítico de extinción” según la Lista Roja de la Unión Internacional para la Conversación de la Naturaleza (UICN). Sin embargo, a finales de septiembre ocurrió un milagro de la naturaleza. Bioparc Valencia fue participe del nacimiento de una cría de esta especie, también conocida como gacela Dama, una de las más grandes y bellas del mundo animal.

Esta especie ha pasado de considerarse extinta a ser hoy un icono de la conservación. Este acontecimiento supone todo un éxito para el Programa Internacional de Conservación de la gacela Mhorr, un proyecto que tiene como fin garantizar la supervivencia de este animal. Según informa Europa Press, el nacimiento del nuevo macho de gacela ha sido fruto de la reproducción controlada y coordinada, suponiendo una gran esperanza para la salvación de esta especie “extinta”, y un gran paso a seguir de cara a salvar muchas otras.

El equipo de cuidado animal del parque zoológico ha garantizado que el parto se desarrolló sin ningún tipo de complicación y que la cría nació con un perfecto estado de salud. A día de hoy, el macho corretea y juega con total normalidad en el recinto exterior que recrea la sabana africana, siempre bajo la supervisión de sus progenitores.

Un hito para Bioparc

Detener la pérdida de biodiversidad y la desaparición de la fauna es uno de los grandes retos a los que se enfrenta la sociedad. Por ello, Bioparc se convierte en un centro zoológico de referencia al conseguir revivir la especie de gacela Mhorr que ya estaba considerada extinta debido a su desaparición en su hábitat natural. En parte deben su éxito a José Antonio Valverde, un visionario que en 1975, ante el escaso número de gacelas que quedaban en el mundo, tomó la decisión de trasladar un pequeño grupo a España para llevar a cabo una reproducción controlada y salvar así la especie.

Son muy pocos los centros especializados que cuidan de este animal en sus instalaciones, puesto que se requiere de ciertas necesidades y responsabilidades para garantizar su supervivencia. Esto se debe a que su hábitat natural, desde el sur de Marruecos hasta el Sáhara Occidental, actualmente se encuentra en una situación grave que dificulta su ocupación. Por ello, Bioparc Valencia recrea fielmente este espacio africano con el fin de ofrecer a sus animales las mejores condiciones de vida posible.

De esta manera, hoy en día la familia “valenciana” de gacela Mhorr está compuesta por dos hembras y la nueva cría. Estos tres animales conviven en armonía y bajo observación en un recinto multiespecie en compañía de otros partículares antílopes, siendo un claro ejemplo de conservación a nivel global, constituyendo así un mensaje esperanzador para el futuro de esta especie.