El repartidor de Uber Eats abre el curioso “burrito” que iba a entregar y va a la policía de inmediato
Tras detectar un olor fuerte, el conductor decidió hacer una parada para comprobar lo que era: el pedido en realidad era marihuana.
El reparto de comida a domicilio ya es la tónica habitual de muchos establecimientos de comida. Era muy popular ya antes de la pandemia, pero durante los meses de confinamiento muchos de ellos se vieron casi obligados a dar este servicio para poder seguir, de alguna manera, trabajando. Y si bien la mayoría de repartos trascurren dentro de los cauces de la normalidad, siempre hay alguna excepción.
Uno de estos ejemplos es lo que le ocurrió a un repartidor en el estado de Nueva Jersey (Estados Unidos). Al recoger el pedido, un burrito en un restaurante de Lindenwold, todo parecía normal. Pero una vez en el coche, el supuesto alimento parecía emanar un extraño olor que nada tenía que ver con lo que debía ser. En lugar de contener el burrito, lo que había dentro era una bolsa con casi 30 gramos de marihuana.
El conductor de vehículo se percató de ello, en su camino hacia Glassboro, al detenerse en Washington Township, después de que el fuerte olor le hiciera sospechar. Y ahí vio la sorpresa: dentro del papel de aluminio no estaba la comida que debería estar, sino la cantidad mencionada de droga. Acto seguido, un preocupado conductor hizo saber a las autoridades locales, el Departamento de Policía de Washington Township, lo que había sucedido.
Lou DeStefano, oficial de policía, se deshizo del envoltorio y confirmó la evidencia: en el interior del mismo había una importante cantidad de marihuana metida dentro de una bolsa hermética. Y, junto a ella, había también una botella de agua y una caja de sopa.
Investigación en curso
Los hechos fueron comentados en tono de broma por la policía local a través de sus redes sociales. “Cuando tu entrega de burritos viene con extra de verdes... ¡Y no estamos hablando de guacamole! Este no era el tipo de envoltorio que nadie pidió”, explican las autoridades a través de un comunicado en Instagram.
Más allá de esta curiosa forma de comentar los hechos, las autoridades confiscaron la sustancia como evidencia y comenzaron una investigación para identificar al destinatario de la droga y para averiguar cómo había llegado hasta el supuesto pedido.
La ley en el estado de Nueva Jersey es clara: está permitida la posesión, dentro de los límites legales. Lo que sí que está prohibido es el transporte o distribución fuera de los canales regulados, incurriendo en una infracción seria. Ahora, lo que las autoridades tratan de determinar es si este pedido violaba alguna ley.
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