SOCIEDAD

El plan de película de dos presos para fugarse de una cárcel española

J.S.S y A.J.J intentaron escapar del Centro Penitenciario de Asturias rompiendo los barrotes de la ventana de su celda y utilizando varias sábanas para descolgarse por ella.

Pixabay

La realidad supera la ficción. Que dos presos utilicen sábanas para descolgarse de su celda y escapar de la cárcel sobrepasa a que un recluso, con un plan preestablecido, ingrese en la cárcel con el mapa de la prisión tatuado en la espalda para sacar de la penitenciaría a su hermano -injustamente apresado-. Cualquier entusiasta de Prison Break verá en esta historia a los hermanos Scofield y Barrows, urdiendo la artimaña más vanguardista para buscar la libertad, tantas veces observada por la ventanilla de sus celdas.

Nos trasladamos al Centro Penitenciario de Asturias para contar el suceso protagonizado por los reclusos J.S.S y A.J.J, dos varones que intentaron escapar de la cárcel en la madrugada del pasado sábado con un plan premeditado. Todo comenzó a las ocho de la mañana, cuando los guardas de seguridad hicieron el recuento de presos y se percataron de la ausencia de los prófugos, que en ese momento se encontraban, según algunas versiones, buscando la libertad camuflados en el jardín.

Tras dar parte de lo sucedido, el Centro Penitenciario avisó a la Guardia Civil, se cerró por completo la cárcel y comenzaron a buscar a los presos, que habían serrado los barrotes de la ventanilla de la celda o haciendo palanca con alguna herramienta. Entonces, ataron varias sábanas para descolgarse por la ventana y huir.

Imagen del Centro Penitenciario de Asturias / Wikimedia Commons

A partir de este punto hay varias versiones: o los prófugos habrían llegado a la zona de las cocinas y se escondieron por el jardín, o bien se habrían movido por varios muros del centro hasta subir al último tejado. Sin embargo, entre ellos y sus posibles sueños, como la fundación de un club de buceo en una isla paradisíaca y una vida en chanclas, se interpuso el módulo de ingresos, que tiene un acceso de dos puertas, siempre bajo control.

Una hora después de que saltasen las alarmas, el funcionario que guarda el portón vio a los fugados en el tejado. Informó al resto de guardias sobre el avistamiento, que acabaron deteniendo a ambos. J.S.S y A.J.J, que fueron encarcelados por seguridad vial y por varios robos con fuerza, respectivamente, se encuentran ahora en el módulo de aislamiento.

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