El gigantesco barco prisión que pretende usar Reino Unido para migrantes
Controvertida medida del Primer Ministro británico para dar cobijo a los solicitantes de asilo mientras se tramitan las solicitudes. Tiene espacio para 500 personas.
Cuando el conservador Rishi Sunak se hizo con el cargo de Primer Ministro británico pronto puso entre sus prioridades el tema de la inmigración. Su objetivo, combatir la inmigración irregular que llegaba al país de forma reiterada, y para ello se propuso “detener” las llegadas a través del Canal de la Mancha. Y en el día de hoy ha llegado una de sus medidas estrella para ponerle remedio: un gigante barco que parece un edificio flotante.
Su nombre es Bibby Stockholm y, tras pasar por una remodelación en el puerto de Falmouth, ha llegado ya a la isla de Portland, al sur de Inglaterra. Allí permanecerá durante, el menos 18 meses, en los que dará cobijo a 500 varones solteros solicitantes de asilo en Gran Bretaña. Una medida, muy criticada, con la que se busca reducir costes de alojamiento en hoteles del país mientras se completan los trámites.
La barcaza, calificada por diferentes ONG como “barco-prisión”, llega en el momento en que el Parlamento británico aprueba una controvertida ley contra la inmigración ilegal. Entre otras cosas, restringe de forma drástica el derecho al asilo, sobre lo que la ONU advierte que va en contra del derecho internacional sobre personas refugiadas.
Indignación entre los residentes
De acuerdo con la BBC, el Ministerio del Interior británico considera que este barco aliviará la presión sobre el sistema de asilo, aunque no todos están de acuerdo con esta afirmación. Desde el Ayuntamiento de Portland no confían en ello y, en palabras a la BBC, han manifestado su “preocupación” por la decisión adoptada. El consistorio recibirá, durante los 18 meses que la embarcación esté en el puerto, unos 2,6 millones de dólares (a unos 4.500 dólares por cama).
“Piensan que Portland es un basurero. La dejan aquí porque creen que no importamos y creen que no armaremos un escándalo. Portland ha sido tratada con desprecio”, señala Charles Richards, residente de la isla de 78 años. Según indica el Gobierno, los ‘pasajeros’ de este insólito barco contarán con asistencia médica, catering y seguridad durante las 24 horas del día.
Mientras tanto, los residentes de la isla temen que su presencia pueda tener impacto en sectores tan primordiales como el de la sanidad. Tras una reunión celebrada la semana pasada, las autoridades locales denunciaron que su puerto era el lugar equivocado para ubicar el Bibby Stockholm.
Por su parte, fuentes oficiales de la isla afirman que desde el Gobierno británico se financiará a los servicios locales, como la policía y la sanidad pública, “para apoyarlos y minimizar el impacto en la comunidad”. Además, señalan que la embarcación está diseñada para “ser autosuficiente, a fin de minimizar el impacto en la comunidad local, con comida, áreas de recreo y provisión sanitaria básica”.