El enfado de los turistas británicos por los precios en España: “Son totalmente disparatados”

El verano se acerca y con ello va siendo el momento de decidir las vacaciones. Después de largos meses de trabajo, hay quien no ve el momento de tirarse en una tumbona de la playa a ver las horas pasar, mientras se disfruta de una bebida refrescante. Como cada verano, España recibirá la llegada de miles de turistas extranjeros, entre los que destacan los británicos.

El año pasado, según la web de reservas Lastminute, ocho de los diez principales destinos de los ciudadanos ingleses estaba en España. Benidorm, Magaluf, Sant Antoni de Portmany, Playa Blanca, Alcudia, Torremolinos, Puerto de la Cruz y Palmanova copan las posiciones de una lista en la que solo aparecían, como ciudades extranjeras, Niza y Albufeira. Entre estos destinos no está Estepona (Málaga), un destino que ha sido criticado en un reciente artículo del diario Express, debido a la presencia cada vez mayor de locales de lujo.

En él, tildan de “disparatados” los precios del local Sublim, un nuevo establecimiento en la Costa del Sol, tras tener que pagar un cargo de 180 libras por la reserva de tumbonas. En el precio se incluye, según la cantidad de usuarios y de la ubicación de la tumbona, un gasto en consumición (en este caso, de 100 euros). Los usuarios, a través de las redes sociales, han advertido a futuros visitantes de estos precios, así como los de la comida.

Crítica también a la comida

“Casi se puede comprar una cama por este precio”, afirma, enfadado, un turista descontento por el precio. “Los precios son totalmente disparatados, demasiado caros. No pienso ir”, apunta otro. De acuerdo con este artículo, el Sublim Beach Club, situado en el complejo de Laguna, se describe en redes sociales con un estatus de ‘lujo’ en plena Costa del Sol. “Nuestro restaurante es un homenaje a nuestra herencia mediterránea. Aquí podrás disfrutar de una deliciosa comida que rinde homenaje a los ingredientes locales y a las tradiciones culinarias de la región”.

Pero no solo han criticado el precio de la reserva en sí misma, también el de la comida. A través de las redes sociales, los usuarios la califican de “demasiado cara”, especialmente tras ver en ensalada de tomate por diez euros. “Consta de 12 cuartos de tomate salpicados con sal”, asegura uno de los clientes que ha visitado el club.

También critican el precio de una ensalada de langosta, por más de 85 libras; un lomo de ternera por 58 libras y los cócteles, por 15 libras. “Esta es una guarnición que esperarías por 2 € en el chiringuito más sencillo. Espero que lean esto y hagan un nuevo plato de tomate exclusivo”, critica otro usuario.

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