María, de 82 años, destapa sin querer una estafa financiera “casi perfecta”
Dieron por muerta a la anciana. Fue al banco con su cartilla y vio que estaba vacía. 2,3 millones de euros en siete estafas gracias a la colaboración de un trabajador de Caixabank.
María, una anciana de 82 años, ha destapado la que era una estafa millonaria, y de la cual se creía que había fallecido hace cuatro años. El suceso comenzó el pasado mes de marzo, cuando la anciana acudió a su sucursal bancaria en Barcelona para pedir un duplicado de su libreta, pero para su sorpresa, el empleado que la atendió, buscó a la mujer en la base de datos y descubrió que llevaba cuatro años muerta según los datos.
Ante la sorpresa de María y del propio trabajador, el banco, Caixabank, se percató de que alguien había presentado un expediente de testamento en la sucursal, y que una supuesta heredera de María había cobrado el saldo de la herencia: un total de 140.000 euros. Tanto la anciana como la propia entidad bancaria presentaron una denuncia ante los Mossos d’Esquadra.
Meses después, la unidad de delitos económicos, liderada por el subinspector José Ángel Merino, ha logrado desmontar una red de estafas que llegó a desviar hasta 2,3 millones de euros de cuentas bancarias bajo el mismo método de los falsos herederos. Uno de los artífices de la estafa era un propio empleado de Caixabank, el cual se encargaba de seleccionar a las victimas, todas personas de edad avanzada, con gran cantidad de dinero, y que no registrasen ningún movimiento durante los últimos años.
Una estafa casi perfecta
La red de estafas había realzado hasta siete veces el método de los falsos herederos, seis de ellas con éxito, excepto en el caso de María. En las otras estafas, ninguna persona había reclamado el dinero de la herencia, por lo que, falsificando la documentación necesaria y valiéndose de un tercero, los estafadores lograron hacerse con el botín. De no ser porque María acudió a la sucursal, la policía catalana no habría tenido conocimiento de todos los movimientos bancarios fraudulentos.
La unidad de delitos económicos comenzó a rastrear los movimientos del dinero y lograron destapar el timo, del cual los implicados blanqueaban los miles de euros sustraídos a través de una empresa inmobiliaria. El pasado 29 de noviembre, los Mossos detuvieron a nueve personas en Rubí, Tarrasa, Sabadell y Barcelona, acusados de estafa, falsedad documental, blanqueo y pertenencia a grupo criminal.