¿Cómo podemos evitar un cortocircuito en nuestro hogar? Un experto nos da cinco “claves”
Juan Yago Roig Olivito, Product Manager Industrial en Grupo Noria, habla con Diario AS sobre por qué se produce un cortocircuito, cuáles son los más comunes...
El origen del incendio del edificio del barrio valenciano de Campanar en el que fallecieron diez personas fue un “accidente fortuito”, según confirmó la delegada del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Pilar Bernabé. Al parecer, empezó en un electrodoméstico de la cocina de una vivienda.
Ahora bien, una de las principales hipótesis que llegó a barajarse es que se pudo haber originado por un cortocircuito en el mecanismo del toldo del apartamento 86. Y es que este tipo de situaciones son muy frecuentes en nuestro día a día, aunque muchas no trasciendan a verdaderas tragedias.
¿Qué es?
Para todas aquellas personas que desconozcan su definición, un cortocircuito es un fallo en un aparato o en la línea eléctrica que se produce cuando la corriente eléctrica pasa directamente desde la fase al neutro sin encontrar ningún tipo de resistencia (en las corrientes alternas) o por el contacto entre ambos polos -el polo positivo y el negativo- (en las corrientes continuas).
Este contacto directo, normalmente accidental, entre conductores de distinta fase o polaridad, provoca que la resistencia del circuito baje hasta cero según la Ley de Ohm, lo cual genera un aumento brusco de la intensidad de la corriente eléctrica, que produce a su vez una subida repentina de temperatura en el cableado.
Causas
El aumento de temperatura ocasionado por el incremento de la intensidad de corriente es tan elevado que, si no se corta la corriente, el cortocircuito puede llegar a derretir el forro aislante de los cables o conductores, quemar el dispositivo o equipo de que se trate -si este se produce en su interior-, o llegar, incluso, a producir un incendio.
Tal y como asegura Juan Yago Roig Olivito, Product Manager Industrial en Grupo Noria, a Diario AS, normalmente los cortocircuitos se producen por “fallos en el aislamiento de los cables, de los conductores o el mal funcionamiento de los equipos eléctricos”.
En su opinión, pueden existir varias causas:
- La sobrecarga continuada de alguna línea puede provocar sobrecalentamiento y el deterioro del aislamiento.
- Instalaciones del usuario (siguiente fotografía), regletas multitoma de mala calidad. Provocada por la primera.
- Receptores (equipos/electrodomésticos que compramos de mala calidad). Por sí solos pueden generar un cortocircuito.
- Instalaciones antiguas no revisadas con conductores y protecciones desgastadas.
- Reformas/instalaciones realizadas por personal no cualificado. Siempre deben realizarse por un instalador autorizado.
A tener en cuenta
Todo ello puede causar importantes daños en viviendas y edificios, por lo que todas las instalaciones eléctricas cuentan con mecanismos de protección como los interruptores de potencia y los fusibles, cuyo objetivo es evitar daños añadidos en bienes y personas.
También se pueden producir cortocircuitos cuando la instalación es muy antigua y se encuentra deteriorada, así como por sobrecalentamiento de los aparatos o cuando se manipula la instalación eléctrica de manera incorrecta. “Hay que tener en cuenta que se hagan bien las cosas y que los instaladores tengan su carné de instalador, hagan sus boletines y lo dejen todo como Dios manda”, matiza el experto.
Recomendaciones
Controlar el buen estado de la instalación eléctrica, sobre todo si ya cuenta con unos años desde su instalación, puede ser la mejor forma de prevenir cortocircuitos. Y ahí no quedan las precauciones que podemos tomar en casa para evitar cortocircuitos. A juicio de Yago Roig Olivito, cabe destacar cinco “claves”:
- Revisión de las instalaciones por instaladores autorizados.
- Reformas y modificaciones de la instalación eléctrica siempre por un instalador autorizado.
Estos dos puntos nos evitarán errores por falta de conocimiento del reglamento de baja tensión como los citados antes. - Evitar que los cables, enchufes, etc., entren en contacto con agua y otros líquidos.
- Instalar los enchufes en lugares espaciosos y alejados de los muebles.
- Revisión exhaustiva por un instalador certificado.
Sobre esto último, el especialista afirma que “no estaría de más que, de vez en cuando en una instalación, pasara un instalador con certificado y llevase a cabo una revisión exhaustiva”. Sí, más que nada porque las protecciones con el paso de los años dejan de funcionar y se desgastan.
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