¿Cómo evitar las picaduras de mosquitos, chinches y garrapatas en verano?

Las picaduras de los mosquitos son realmente incómodas. Pueden no dejarte dormir, pueden causarte reacción, e incluso provocar heridas en la piel. Hay algunas acciones que puedes intentar hacer para evitar las picaduras de mosquitos.

Entre las principales, instalar mosquiteras en casa; utilizar productos que repelen los mosquitos con más o menos eficacia, desde velas, pulseras con citronela, sprays específicos… También influye si en determinadas horas del día llevas pantalón o camiseta de manga larga, e incluso si en determinadas zonas húmedas o a la caída del sol te pones prendas que cubran tu piel.

Si viajas al extranjero, es muy importante protegerte con más cuidado, ya que los mosquitos pueden transmitir más enfermedades, por eso incluso hay vacunas como la de la fiebre amarilla, o pastillas contra la malaria, para evitar que las picaduras te afecten demasiado.

Cómo evitar las picaduras de chinches

Las chinches se esconden durante el día en las camas y lo que las rodea, en las grietas de las sillas, los sillones, las cortinas, las alfombras y moquetas, los armarios e, incluso, en las grietas de paredes y suelos y detrás del empapelado. Nuestro calor les encanta, así como los olores que emitimos.

Las picaduras de chinches pueden parecer picaduras de otros insectos (por ejemplo, mosquitos), sarpullidos (por ejemplo, eczema o infecciones micóticas) e incluso urticaria. Algunas personas no reaccionan en absoluto a las picaduras de chinches. Casi todas las picaduras de chinches producen cierto grado de incomodidad, generalmente picazón e inflamación.

Signos y síntomas de picaduras de chinches

Para evitar que las chinches se acerquen a ti, ten en cuenta que pueden trepar por los cabeceros de madera o de metal, aunque no les gusta cobijarse en éstos. Tienen unos pequeños ganchos o pinchos en sus patas, lo que les permite agarrase a pequeñas rendijas y poros de las superficies rugosas. Las superficies lisas como el cristal o la porcelana son sus mayores enemigas.

Así, pueden trepar por la sábana que haya quedado colgada de la cama o los muebles o incluso la pared que haya cerca para llegar a su comida de sangre. Si puedes, coloca la cama un poco separada de la pared y los muebles cercanos como las mesillas de noche. Intenta no almacenar nada debajo de la cama. Asegúrate de que las sábanas o las mantas están bien colocadas y no tocan el suelo. Aire siempre que puedas las sábanas, tener pocos muebles en la habitación, y no almacenar ropa en algún punto para que no tengan tantos lugares donde ir.

Cómo evitar las picaduras de garrapatas

Las garrapatas pueden transmitir más de 50 enfermedades. Se pegan a cualquier parte del cuerpo, siendo las partes húmedas o con pelo las más afectadas, tales como la ingle, las axilas y el cuero cabelludo.

Los veterinarios, dueños de ganado, mascotas, animales, son las personas que más pueden padecer las picaduras de las garrapatas. Para evitar, es aconsejable que siempre que estés en contacto con los animales, imagina un rebaño de ovejas, vacas, una cuadra, lleves calzado cerrado, con calcetines, pantalón largo.

Aunque la aparición de las garrapatas se ha asociado habitualmente al verano, el cambio climático ha provocado que sigan activas en los meses cálidos del otoño, e incluso hasta comienzos del invierno si las temperaturas son altas como ha ocurrido en España últimamente.

Si tienes que pasar mucho tiempo en el campo, con el calzado siempre cubriendo tus pies, intenta llevar ropa de color claro, por si se agarra una garrapata, reconocerla de manera rápida. No las quemes si las ves, ni intentes quitarlas con fuego, utiliza unas pinzas. Debes tirar de ella hacia arriba, para que salga sin hacerte más herida, y después lava la zona con agua y jabón. Si tuvieras fiebre o malestar los días siguientes, acude al médico.