A los 14 años, este genio se unió a SpaceX y solo dos años después da la espalda a Elon Musk tras subir el nivel de su talento

Kairan Quazi, un joven de 16 años, ha decidido abandonar su trabajo en Starlink para dedicarse al mundo de las finanzas. Desde los dos años, Quazi ya era capaz de componer frases largas, en prescolar mantenía debates sobre geopolítica en plena noche con sus padres y a los 14 años se graduó en la Universidad de Santa Clara. El estudiante más joven en los últimos 170 graduado en la institución.

Su capacidad intelectual le ha llevado a ser uno de los pocos menores capaces de conseguir un título universitario. A pesar de su categoría especial como un joven genio, Quazi ha tenido serios problemas para que el mundo le tome en serio. Después de su graduado, a los 14 años, quiso buscar un trabajo relacionado con su título de ingeniería, pero parecía imposible.

Las empresas en las que mandaba su currículum no lo tomaban en serio, veían su edad como un factor importante a tener en cuenta y ninguna quiso contratarle. Después de 95 rechazos en puestos de ingeniería, Elon Musk le ofreció la oportunidad en 2023 de formar parte de SpaceX.

“Adultismo cultural”

Ya no era un becario, sino un ingeniero más de software en Starlink. La empresa de constelación de satélites destinados a proporcionar internet en todo el mundo se había convertido en la encargada de ofrecerle a Quazi su primer contrato como ingeniero. Su nuevo puesto de trabajo consistía en desarrollar sistemas críticos para optimizar y programar los haces satelitales.

Se trata de un puesto de trabajo complejo, pues estos satélites garantizan la señal de internet para millones de usuarios y requieren de un control con precisión quirúrgica. Un error de codificación supondría la caída de toda la conexión a internet. La empresa le había confiado un puesto de suma importancia a una edad muy temprana.

Según Quazi, en una entrevista con el Business Insider, Starlink fue la única empresa que no había “utilizado mi edad como un indicador arbitrario y anticuado a mi madurez y capacidades”. Quazi entiende que existe una especia de “aultismo cultural”, donde gente prometedora de su edad se choca con una barrera laboral por culpa de una sociedad construida por adultos.

Abandona su puesto por Wall Street

Después de dos años trabajando para Starlink, Quazi decidió dar un giro repentino a su vida y dedicarse a los números. A sus 16 años decidió dejar SpaceX para trabajar como Desarrollador Cuantitativo en Citadel Securities, considerado como uno de los fondos de cobertura más influyentes y herméticos del mundo.

En esa misma entrevista, Quazi explica que “las finanzas cuantitativas ofrecen una combinación excepcional: la complejidad y el desafío intelectual que también presenta la investigación en IA, pero a un ritmo mucho más rápido. La firma del multimillonario Kenneth C. Griffin le da la posibilidad de “ver un impacto medible en días, no en meses o años como en muchos entornos de investigación”, añade él.

La rapidez con la que Quazi es capaz de observar el impacto de su investigación ha sido atractivo suficiente para convencer al joven genio de cambiar su puesto de trabajo. En su nuevo empleo, diseña algoritmos bastante complejos que analizan los mercados en tiempo real y ejecutan operaciones en milisegundos. Se trata de otro tipo de desafío intelectual.

¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí