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Señalan cuáles son los idiomas más difíciles de aprender para los españoles

El japonés y el chino mandarín empatarían en el puesto del idioma más difícil de aprender de los españoles, dos lenguas cuyo interés está creciendo en Occidente, según la plataforma de aprendizaje online Preply.

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Aprender idiomas es el objetivo principal de muchas personas, debido a que nos puede aportar multitud de cosas positivas, desde conseguir buenas notas o encontrar un puesto de trabajo hasta ascender en el empleo. A pesar de que este proceso siempre conlleva dedicación y motivación, a los españoles hay ciertos idiomas que se les atragantan por su alto nivel de complejidad y sus diferentes características respecto al español.

Si nos centramos en el continente europeo, la situación es más sencilla para los hablantes de español, ya que la mayoría de idiomas que se hablan en los países vecinos son lenguas romances, lo que significa que comparten con el español su origen con el latín.

Seis lenguas romances más habladas

Las seis lenguas romances más habladas por número total de hablantes son el español (489 millones), el portugués (283 millones), el francés (77 millones), el italiano (67 millones), el rumano (24 millones) y el catalán (10 millones). Sin embargo, el número de lenguas romances conocidas supera la veintena, aunque actualmente muchas variedades regionales están gravemente amenazadas y solo seis de ellas tienen un uso general y varios millones de hablantes.

Para un hispanohablante, las lenguas del mismo origen, las romances o neolatinas, resultan más fáciles de aprender, puesto que comparten estructuras, léxico y grafías. Por ello, a la hora de aprender un idioma que utiliza otro alfabeto diferente al nuestro, el aprendizaje se dificulta y ralentiza, ya que se deben conocer primero las letras, sus sonidos y la forma en la que se escriben.

El japonés y el chino mandarín

Esto ocurre con el ruso, el árabe, el coreano, el chino o el japonés. Estas tan solo son algunas de las lenguas que resultan más complejas para los hispanohablantes. Ahora bien, cabe destacar que aquellos idiomas lejanos a la gramática española son los más complejos.

Según la plataforma de aprendizaje online Preply, que cuenta con una herramienta que calcula el tiempo que se necesita para aprender un idioma y demuestra estas diferencias en función del país de origen, el japonés y el chino mandarín empatarían en el puesto del idioma más difícil de aprender de los españoles, dos lenguas cuyo interés está creciendo en Occidente.

Lenguajes europeos más difíciles para un español

En el caso de que un español partiese de un nivel A1 (el más básico) y quisiera llegar a un B2 (con fluidez para la conversación), debería estudiar 1.544 horas, 29 horas semanalmente. Pese a ello, esto no podría ser de forma independiente, debido a que necesitaría al menos tres horas a la semana con un profesor para profundizar en los aspectos más complejos.

En relación a los lenguajes europeos más difíciles para un español, destacan el alemán, el polaco, el finlandés o el húngaro. Y es que, aunque se escriben con la grafía latina, utilizan una serie de consonantes acentuadas, sufijos, y vocales que son totalmente ajenos al español.

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