Revlon, uno de los gigantes de la cosmética, en bancarrota
La compañía tenía el pasado 31 de marzo una deuda a largo plazo de 3.310 millones de dólares. La declaración en bancarrota le permitirá seguir operando.
El gigante de la cosmética Revlon se declaró este jueves en bancarrota, aduciendo “problemas de liquidez” debidos a los impactos globales producidos por la alta inflación, las persistentes trabas en la cadena mundial de suministros y las obligaciones con sus acreedores. La compañía emitió un comunicado la pasada madrugada en la que anunció que se acoge voluntariamente al capítulo 11 del Tribunal de Bancarrotas, equivalente al concurso de acreedores español.
La multinacional, que ha precisado que ninguna de las filiales operativas internacionales de Revlon está incluida en el procedimiento, excepto aquellas de Canadá y el Reino Unido, ha explicado que la medida permitirá, mientras continúa operando, reorganizar estratégicamente la estructura de capital de la empresa y mejorar su perspectiva a largo plazo, especialmente en medio de las restricciones de liquidez provocadas por desafíos globales como la interrupción de la cadena de suministro y el aumento de la inflación, así como las obligaciones con sus acreedores.
“La demanda de nuestros productos por parte de los consumidores sigue siendo fuerte y seguimos teniendo una posición saludable en el mercado. Sin embargo, nuestra desafiante estructura de capital ha limitado nuestra capacidad para navegar por cuestiones macroeconómicas a fin de satisfacer esta demanda”, ha declarado Debra Perelman, presidenta y consejera delegada de Revlon.
Deuda de casi tres mil millones de euros
Según la cadena CNBC, la compañía tenía el pasado 31 de marzo una deuda a largo plazo de 3.310 millones de dólares (casi tres mil millones de euros), mientras que su capitalización de mercado era de 123 millones de dólares al cierre de la bolsa de Wall Street ayer miércoles. En las horas previas a la apertura del mercado bursátil, la compañía paralizó las operaciones sobre sus acciones, que caían un 4,44 % en su última cotización.
Revlon espera recibir una financiación de 575 millones como deudor en posesión (“DIP”), lo que le va a permitir apoyar sus operaciones corrientes, ya que, según mantiene, todavía goza de “un fuerte apoyo de los acreedores” de la compañía. La compañía también se ha visto afectada por la cuota de mercado arrebatada por la creciente competencia de la aparición reciente de marcas como Fenty Beauty de Rihanna y Kylie Cosmetics, apoyada por Kylie Jenn.
Nacida en 1932, la compañía es una de las más importantes del campo de la cosmética -especialmente cosmética del cabello-, está presente en 150 países, emplea a unas 6.000 personas y es propietaria de marcas icónicas como Elizabeth Arden, Mitchum, Cutex, además de algunas asociadas a personalidades como Britney Spears o Christina Aguilera.