Restringido el uso de agua en dos ciudades italianas
La alerta roja por calor en la que se encuentra gran parte de Italia choca con una de las mayores sequías a las que se enfrentan.
La llegada del calor en las ciudades de Pisa y Verona, en Italia, se ha visto marcada por la restricción del uso de agua. Ello se debe a la crítica sequía a la que se enfrentan ambas regiones. Estas restricciones pasan por limitar el consumo de agua para fines estrictamente domésticos, así como la higiene y la limpieza personal.
Así lo han expresado las autoridades regionales de Verona. Además, han señalado que la limpieza de los automóviles, el riego o el llenado de piscinas quede limitado y, en el intervalo de entre las 06:00 y las 21:00 horas queda terminantemente prohibido realizar estas actividades. La norma se mantendrá, en principio hasta el 31 de agosto y la penalización por no acatarla es una multa de hasta 500 euros.
En la misma línea se han manifestado las autoridades de Pisa, que impondrá medidas similares a partir del próximo lunes 11 de julio.
Una de las mayores sequías de la historia
Italia se enfrenta a una de las mayores sequías de su historia, si no la mayor. En los últimos 30 años se han llegado a reducir las precipitaciones entre un 50 y un 60%, según Euronews, y la mayor afectada por ello es la cuenca del río Po, el más importante del país.
Y, más allá de las medidas que se han tomado en Pisa y Verona, otras ciudades están sufriendo las consecuencias. En Milán, por ejemplo, las autoridades han decido dejar de suministrar agua a las fuentes más grandes.
En este sentido, el primer ministro italiano, Mario Dragui, ha anunciado que el próximo lunes se comenzarán a tomar medidas en este ámbito, según ha reportado Europa Press. Y es que, además, gran parte de Italia se encuentra en alerta roja por calor.