La alcaldesa de París pide el voto para Pedro Sánchez

No es habitual que una figura de gran calado político haga campaña en un país que no sea el suyo. Pero es que el caso de Anne Hidalgo, alcaldesa de París desde 2014, es algo particular. Por el cargo que desempeña, uno podría asumir que es la más francesa de las francesas. Al fin y al cabo, está al timón del epicentro administrativo del país de Napoleón. Pero las apariencias, a veces, engañan. Es francesa, sí. Pero también es española.

Nació en San Fernando (Cádiz). Es decir, bastante lejos de la nación en la que acabaría haciendo carrera. Su abuelo fue un represaliado republicano que se refugió en Francia. Su padre, también de tendencias izquierdistas, acabaría, igualmente, emigrando. A Lyon. Ahí se crio Anne Hidalgo antes de que los devenires de las vida la llevaran a París, población a la que, con el tiempo, quedaría estrechísimamente vinculada.

Es, probablemente, el último gran activo del Partido Socialista francés, una formación que quedó extraordinariamente mermada después de la pérdida de popularidad del expresidente François Hollande. Desde el otro lado de los Pirineos, Hidalgo ha intentado echarle un capote a su colega progresista, el candidato Pedro Sánchez. Es de sobra conocedora de la situación en la que se encuentra España. Francia lleva ya muchos años conviviendo con el auge de la extrema derecha.

No ha elegido una jornada cualquiera para elevar sus proclamas internacionalistas. Ha sido en el día de la fiesta nacional francesa. En la conmemoración de la Toma de la Bastilla, ni más ni menos. A su vera estaba otro actor emergente en el tablero de la socialdemocracia. El recién electo alcalde de Barcelona, Jaume Collboni. El líder del consistorio catalán ha sido uno de los invitados de honor en los desfiles militares que han recorrido las calles de París.

Dos nacionalidades

Después de los actos solemnes, los dos han hecho unas declaraciones conjuntas en las que se han regalado la oreja mutuamente. Desde 2016, Barcelona y París tienen un convenio de cooperación que, claramente, la nueva administración tiene interés en mantener. Pero, en clave más global, Hidalgo ha enviado un mensaje de aliento al secretario general del PSOE. “Le doy todo mi apoyo a Pedro Sánchez, tiene que ganar, no únicamente para España, no puede haber un retroceso tan grande”, ha aseverado.

A pesar de que, por motivos diplomáticos, las grandes figuras extranjeras suelen ser cautas en su valoración de los procesos políticos de terceros países, son varios los rostros internacionales que han mostrado preocupación ante la perspectiva de que un partido de ultraderecha pudiera integrarse en el ejecutivo español. No obstante, es de justicia reconocer que, como tiene la doble nacionalidad -y, por lo tanto, es tan ciudadana como cualquier otro- la de Hidalgo no es, realidad, una proclama que venga de labios foráneos.