El cambio climático sigue derritiendo lentamente los glaciares y capas de hielo en todo el mundo. A medida que el planeta y sus océanos y mares se calientan, la llamada criosfera se derrite lentamente.
El deshielo también provoca que el nivel del mar suba y, de hacerlo de una manera abrupta, muchas zonas costeras se podrían ver afectadas en un futuro. Para que esto ocurra tienen que producirse dos factores: la expansión del agua a medida que se calienta y el agua añadida procedente del deshilo de glaciares y capas de hielo.
Planificar una subida constante del nivel del mar es posible, pero los científicos ahora están preocupados por si enormes trozos de hielo se derrumban. Por ello, Alex Brisbourne, glaciólogo del British Antartic Survey, y Theodore Scambos, investigador antártico de la Universidad de Colorado, han creado un mapa con los puntos que están vigilando de cerca.
Según estos científicos, los glaciares serían los primeros en desaparecer. Cuando los glaciares empiezan a romperse se desencadena un bucle de retroalimentación negativa en el que el agua del deshielo calienta el glaciar, creando todavía más agua de deshielo. Durante estos años, los que se encuentran fuera de Groenlandia y la Antártida han sido los principales responsables de la subida del mar.
Respecto a las capas de hielo de la Antártida y Groenlandia, estas podrían provocar una subida de 17 metros del nivel del mar y otra de 7 metros, respectivamente.
Estos son los puntos que más preocupan
Además de estos glaciares y capas de hielo, los científicos resaltan que es importante tener en cuenta las variaciones locales del nivel del mar, ya que no aumenta igual en todas partes y puede ser mayor a escala local que a escala mundial.
La gravedad también influye en la subida del nivel del mar. Por un lado, las capas de hielo pueden atraer el agua hacia sí, elevando el nivel de mar localmente y, por otro, los glaciares, al ejercer presión sobre la Tierra, aplastan la corteza terrestre en los polos. Dicha presión desaparecerá cuando se derritan las capas de hielo, influyendo en la rotación, forma y gravedad de la Tierra. Se conoce como rebote postglaciar y ya ha empezado a aparecer.