Estonia se prepara para la guerra
El país báltico no se fía de los planes de Rusia en el conflicto y moviliza a la ‘Liga de Defensa’, un cuerpo paramilitar formado por 830 reservistas.
La guerra se libra en Ucrania en el campo de batalla, pero desde hace casi un año todos los países europeos miran con recelo y preocupación todo lo que acontece en el conflicto. No hay ninguna certeza de que la “operación militar especial” anunciada por Putin escale y afecte a más países, pero eso no significa que los Gobiernos no tomen medidas y se preparen para un eventual ataque por parte de las tropas rusas. En especial, los países fronterizos con Rusia.
Es el caso de Estonia, que esta semana ha anunciado un importante movimiento en cuando al Departamento de Defensa se refiere. El país báltico ha decidido movilizar a la conocida en su territorio como Liga de Defensa, un cuerpo paramilitar formado por 830 reservistas. El objetivo, según detalla el Gobierno, es completar un entrenamiento denominado Okas, una práctica consistente en simular los combates que se están produciendo en Ucrania.
No existe amenaza rusa en estos momentos
La decisión de gran calado tomada por el Ejecutivo de Estonia ha levantado una preocupación evidente entre la población, pero desde la presidencia del país se ha enviado un mensaje de tranquilidad, argumentando que no existe amenaza real de Rusia en estos momentos. El entrenamiento de la Liga de Defensa, explican, es un movimiento para probar diversos entrenamientos militares.
Estonia no descarta ser objetivo de Rusia
Pero a pesar de la llamada a la calma, lo cierto es que, desde el 24 de febrero del pasado año, cuando comenzó la invasión de Ucrania por parte de Rusia, en Estonia se vive con preocupación lo que puede acontecer en la guerra. A nadie allí se le escapa que Rusia y Estonia son dos países que comparten frontera y desde el inicio Tallin, como miembro de la OTAN, se ha posicionado del lado de los aliados occidentales.
De hecho, Estonia ha reconocido varias veces la desconfianza que existe sobre Rusia. Por ejemplo, hace unos meses, en una entrevista en EPE, la embajadora de Estonia en España, Mariin Ratnik, aseguró que no descartan ser el próximo objetivo de Rusia si finalmente desde el Kremlin deciden atacar a un país miembro de la OTAN.