El cambio del SEPE en el subsidio por desempleo
La subida del salario mínimo interprofesional ha afectado al requisito de la renta que impone el SEPE a los solicitantes del subsidio por desempleo.
El salario mínimo interprofesional (SMI) ha subido un 8%. Ha pasado de los 1.000 a los 1.080 euros en cada una de las 14 pagas del año. Esta medida, que fue anunciada por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, el pasado 31 de enero en el Senado, afecta a otras prestaciones que corren a cuenta del Estado. Así ocurre con el subsidio por desempleo del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE).
Con esta nueva subida, ha cambiado uno de los requisitos para poder acceder al subsidio por desempleo. Más concretamente, el que recoge que tendrán derecho a este aquellas personas que no perciban rentas, independientemente del tipo del que estas sean, superiores al 75% del SMI. Dentro de esta medida no contabilizan la parte proporcional de las dos pagas extras. Lo que sí se tienen en cuenta son las rentas íntegras o brutas.
Otros requisitos
Además de las rentas percibidas, a la hora de poder percibir el subsidio por desempleo, el SEPE tiene en cuenta más requisitos:
- Estar desempleado/a y, además, encontrarse en situación legal de desempleo —bien sea por despido, finalización del contrato, cese del mismo, etc.—.
- Que la persona demandante de esta ayuda esté inscrita como demandante de empleo. Y que, además, mantenga esa inscripción durante todo el período de tiempo que esté recibiendo el subsidio.
- Durante el tiempo de cobro del subsidio, el beneficiario del mismo deberá adquirir un compromiso de actividad. Es decir, que se comprometa a buscar de manera activa un nuevo empleo.
- El período de cotización. Este puede variar en función de la situación particular de cada uno. Si el solicitante tiene responsabilidades familiares, el mínimo exigido son tres meses. Mientras que, si no las tiene, el mínimo requerido son tres meses.
Subida del salario mínimo
La subida del salario mínimo a 1.080 euros responde a la promesa del Ejecutivo de situarlo en el 60% del salario medio del país. Aunque esta medida fue aprobada el pasado 31 de enero, se va a aplicar con carácter retroactivo desde el primer día de este 2023 y afecta a casi dos millones de trabajadores.
La vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, considera que el SMI es la medida “más eficaz” para salir de la crisis y “compensar la pérdida de poder adquisitivo” de las familias.