La FEDGLP anuncia paros en la distribución de butano en toda España

La Federación Española de Distribuidores de Gases Licuados del Petróleo (FEDGLP) ha anunciado paros en la distribución a domicilio de butano en todo el país. Y será el lunes 21 de octubre cuando se reúnan en asamblea para decidir el calendario de actuaciones.

Entre sus principales reclamaciones al Ministerio de Transición Ecológica, y a las principales operadoras, la FEDGLP afirma que no han respondido hasta la fecha a las peticiones reiteradas de una retribución que cubra los gastos reales del reparto a domicilio.

Afirman que “el progresivo aumento de los costes tiene su origen en la escala inflacionaria, en el incremento de precio de los carburantes de los vehículos de reparto, el cumplimiento de las regulaciones en materia de seguridad y bajas emisiones, el incremento de los costes salariales y en la dificultad de mantener una plantilla estable de trabajadores dispuestos a desempeñar una profesión tan exigente y dura como es la del reparto domiciliario de bombonas”, tal y como han afirmado en un comunicado esta mañana.

El lunes se anunciarán los paros en la próxima Asamblea General, donde se establecerá un calendario que afectará en el reparto domiciliario que tendrá lugar hasta que se produzca la actualización de las condiciones económicas del servicio.

6 millones de hogares afectados

La federación calcula que serían seis millones de hogares los que se verían privados de la energía, esencial para “calentar sus hogares y cubrir el resto de las necesidades energéticas diarias. Es precisamente por ello que llevan años soportando un incremento de costes que en la actualidad se ha convertido en insostenible económicamente para su actividad”, especialmente ahora que llega la bajada de temperaturas.

Además, la desaparición del servicio “provocaría la desaparición de las más de 170 pymes que actualmente desempeñan esa labor y con ello la pérdida de más de 3.500 empleos directos que generan”.

Según el informe elaborado por la consultora BDO España, se concluye que la retribución mínima necesaria que deberían recibir las agencias para cubrir los costes del reparto domiciliario tendría que ser de, al menos, 4,8 euros por bombona.

“El precio de la venta al público de la bombona regulada en España puede llegar a estar por debajo de la mitad del precio de venta del resto de mercados europeos. De hecho, el precio en determinados países puede ser multiplicador por tres frente al precio que tiene España”.

Con la entrada en vigor del Real Decreto-Ley 11/22 de protección de los consumidores ante la crisis energética, el Gobierno congeló el precio máximo de venta de la botella en 19,55 euros. La actualización urgente de la Orden IET/389/2015 solicitada por el sector, mantendría el mercado español como el más económico de Europa, garantizando a la vez la calidad del servicio domiciliario.

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