Advertencia de Gonzalo Bernardos sobre el precio del aceite de oliva

El aceite de oliva es uno de los productos más extendidos en todo el mundo, especialmente en la zona del Mediterráneo. En la última campaña, el consumo de este producto a nivel mundial fue de unos 2,5 millones de toneladas métricas, lo que implicó un descenso de 150.000 toneladas métricas con respecto al año anterior. En el caso de España, también descendió de manera notable su consumo, con 43.513 litros menos en 2023 que en 2022.

El principal motivo de esta bajada en el consumo se debe principalmente al aumento de su precio. Según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, en la semana del año 2023 el precio del aceite de oliva virgen extra alcanzó un pico de más de 800 euros por cada 100 kilos, es decir, a más de 8 euros el litro. Estas cifras suponen casi el doble con respecto a la misma semana del año anterior.

Una bajada de los precios

Sin embargo, desde abril del presente año aproximadamente, los precios de este ‘oro líquido’ han descendido y se encuentran más o menos estables. Estos datos suponen que ya en varios supermercados el aceite de oliva comience a establecerse por debajo de los 7 euros.

El profesor de economía y tertuliano habitual de programas de televisión de cadenas como La Sexta, Gonzalo Bernardos Domínguez, ha seguido de cerca la evolución de este alimento y ya preveía su bajada desde hace un tiempo. El director general de Deoleo, la principal compañía de aceite de oliva del mundo, establecía que en enero de 2025, el precio del aceite podría descender hasta los 4 euros.

En una nueva intervención en el programa de Más vale tarde, de La Sexta ha afirmado que fue muy criticado cuando auguró la bajada del precio del aceite de oliva, pues su constante subida parecía que se mantendría igual. Bernardos ha afirmado que continuará con las bajadas gracias a una “cosecha impresionante”. La Sexta a través de sus redes sociales ha recogido las declaraciones de este economista.

Pronostica una cosecha de más del doble que el pasado año

En su momento, el economista afirmaba que para que se diese una buena cosecha sería necesario que lloviese durante el mes de septiembre, “sobre todo en Andalucía”. Estas declaraciones fueron emitidas a finales de agosto del presente año, teniendo en cuenta que “no ha helado en el mes de mayo” y se habían producido lluvias durante ese mes, además de que también se habían dado precipitaciones en julio y agosto.

El economista pronosticaba que podría darse una cosecha de 1.700.000 toneladas, lo que supondría el doble que el pasado año, teniendo como consecuencia una gran caída de los precios, especialmente en enero, cuando entre la cosecha. Si bien, este ha avisado a los consumidores de que no es necesario acumular grandes cantidades: “Compre solo lo estrictamente necesario porque va a continuar bajando”.

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