Preocupante descubrimiento en algunas aguas minerales: “Es un químico eterno”
Se trata de ácido trifluoroacético (TFA), un químico proveniente de algunos pesticidas que puede conllevar graves daños en la salud de las personas.
Se ha descubierto que el agua mineral de varios países europeos está contaminada con ácido trifluoroacético (TFA) un tipo de sustancia perfluoroalquiladas (PFAS), un químico sintético, que pueden provocar graves daños en la salud de las personas. Se le conoce también como ‘químico eterno’, ya que son extraordinariamente persistentes en el medioambiente y en el cuerpo de los seres humanos.
Este hallazgo resulta especialmente sorprendente, pues el agua mineral debería ser totalmente ‘pura’ y estar aislada de productos químicos artificiales, por lo que se cree que esta contaminación puede deberse al uso de pesticidas. La Red de Acción en Plaguicidas de Europa (PAN) detectó este componente tóxico en 10 de 19 aguas minerales analizadas y en niveles hasta 32 veces superiores al límite.
Esto conlleva la necesidad de llevar a cabo medidas urgentes para paliar este problema, empezando por la limitación de algunos pesticidas con TFA. “Esto ha pasado completamente desapercibido y es preocupante porque estamos bebiendo TFA”, dijo Angeliki Lysimachou, consultora de la Red de Acción en Plaguicidas de Europa. Si bien, en ningún momento se culpa a los fabricantes de agua.
Un gas de efecto invernadero que puede permanecer en la atmósfera cientos de años
Además de pesticida, el TFA es un refrigerante, a menudo utilizado en la producción de energía limpia, el cual, a diferencia de lo que se pensaba, es un potente gas de efecto invernadero que puede permanecer en la atmósfera durante cientos de años. Igualmente, la tecnología de filtración que se utiliza para eliminar los PFAS no es capaz de abordar los TFA a escala industrial.
Este estudio ha surgido a partir del descubrimiento de TFA en el 93% de 600 muestras de agua belgas, con niveles especialmente altos en las regiones agrícolas. También autoridades suizas encontraron este componente en las aguas subterráneas del país y en Estados Unidos todas las muestras de agua de lluvia analizadas en Michigan contenían esta sustancia.
Esta sustancia puede conllevar graves problemas de salud, como daños hepáticos, enfermedad tiroidea, obesidad, problemas de fertilidad y cáncer. De ahí que la Comisión Europea esté proponiendo la prohibición de dos pesticidas comunes que contienen este tipo de compuesto. “El primer paso es prohibir las fuentes más extendidas de TFA, los pesticidas PFAS”, afirma el documento de PAN.
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