Broken Sword 2: Las fuerzas del mal
Broken Sword 2: Las fuerzas del mal - La Selva y la Cabaña
George Stobbart, probablemente hijo pijo de algún acaudalado empresario americano, regresa a París para intentar restablecer sus relaciones sentimentales con la chica de las minifaldas menguantes, Nico la periodista de Le Monde.
La selva y la cabaña
Hay alguien tocando un órgano en la cabaña, pero aunque George intenta gritarle, no hay manera de llamar su atención. Así que coloca el diario en la hojarasca húmeda y usa el fetiche de obsidiana en la rueda del molino de agua para crear chispas, fuego, humo y la salida de la cabaña del misionero francés Hubert, el "padre" Hubert.
Hubert ha encontrado a Nico, que ha sido mordida por una serpiente venenosa acuática y ha entrado en coma [ella, no la serpiente]. Una tribu cercana conoce una raíz que contiene el antídoto al veneno de la serpiente, pero se muestra renuente a acompañarle con el alzacuellos arrugado. ¿Cómo? Sí, devotos míos, uno no puede ir por la selva con el alzacuellos hecho unas medias... quise decir bragas... hoy tengo el día tonto.
George recoge la enredadera y la coloca en la prensa, a modo de cadena. Coloca el alzacuellos en la prensa, y luego recoge la cruz y la usa en la prensa que hace un planchado en seco alucinante de la tira de cartón endemoniada. Tras recogerlo del suelo, se lo entrega al "padre" Hubert.