Cuatro oros andando

El auténtico rey de la marcha de las últimos tiempos. Campeón olímpico desde Atlanta '96 a Atenas '04 en 50 km. y doblete con 20 km. en Sydney. El polaco fue el gran dominador de la prueba durante 12 años, ya que además de los títulos olímpicos hay que tener en cuenta que también se hizo con los campeonatos mundiales de 1997, 1999 y 2003. Robert Korzeniowski nació en 1968 en la localidad polaca de Lubaczow, una zona en la que la marcha era un deporte popular. Pero el joven Robert, fan de Bruce Lee, se decidió primero por el judo tras superar un ataque de reuma. Sin embargo, tras el estado de emergencia decretado en Polonia, las autoridades estatales no veían con buenos ojos que los jóvenes aprendieran a pelear en las escuelas, por lo que Korzeniowski se quitó el kimono para dedicarse a correr. En 1984 participó en su primera competición, el campeonato polaco de marcha, pero quedó en última posición. Tenía 14 años. Un año más tarde, ganó la carrera. Sin embargo, fue su cuarta posición en los 20 km. del Campeonato de Europa de 1990, celebrado en Split, donde Robert Korzeniowski se convenció de que podía ser un atleta profesional. Aun así, tuvo que superar la decepción de ser descalificado en los Juegos de Barcelona y en el Campeonato del Mundo de 1993. Tras cambiar su mentalidad y su forma de entrenar, Korzeniowski se convirtió en un marchador invencible que lo ganó todo -Juegos Olímpicos, Mundiales y Europeos- después de su bronce en el Mundial de 1995 y hasta su gloriosa retirada en Atenas 2004. Tras su último gran éxito decidió retirarse y dejar tras de sí un gran currículum. Como entrenador de Paquillo, aplicó una novedosa técnica de preparación experimentada por él mismo denominada crioterapia, consistente en someter al cuerpo a temperaturas extremas bajo cero en cortos periodos de tiempo. Pablo Bargueño