El primer rey de la piragua

En muy pocas localidades españolas el piragüismo es el deporte rey. Pero Candás (Asturias) es una de ellas. Y en este pueblo costero nació un 20 de diciembre de 1953 Herminio Menéndez Rodrigo, un auténtico crack de la piragua mucho antes de que despuntara David Cal. Se puede decir que Menéndez, como hijo y nieto de pescadores, siempre ha tenido muy presente el mar. A los 17 años tomó la decisión de dejar de lado el fútbol para centrarse en el piragüismo, que, además de los tres metales olímpicos, le ha otorgado nada menos que 40 campeonatos de España en todas las categorías. El cénit de su carrera deportiva se produjo en los Juegos de Moscú, donde se hizo con la plata en el K-2 de 500 metros y con el bronce en la prueba larga junto a su compañero Misioné. Como anécdota quedan las 425.000 pesetas de prima que recibió el palista por ambas medallas. Tras los Juegos Olímpicos de Los Ángeles, los cuartos de su carrera, el olímpico asturiano se retiró, cambiando la pala de su exitosa piragua por la dirección deportiva. En un primer momento, siguió muy involucrado con el movimiento olímpico como vicepresidente de la Federación Española y Piragüismo y Director General del Deporte en Asturias. Años más tarde fue nombrado presidente de la oficina de Barcelona'92 en Madrid, y además tuvo el honor de introducir la antorcha olímpica en el estadio de Montjuic. En su tercera etapa profesional, Herminio Menéndez se convirtió en un hombre de fútbol como director general de equipos y también como representante de jugadores. Pablo Bargueño