El Real Madrid fue el mejor del curso pasado de octubre a mayo, tanto en España como en Europa, pero en las eliminatorias se desplomó, no dio el nivel. En el club lo achacan a un derrumbe físico coincidiendo con el estreno de la nueva Euroliga y de un calendario que obliga a disputar casi noventa partidos. Es cierto, hubo mucho de eso en el hundimiento blanco, pero también lo es que el final de temporada generó algunas dudas sobre la plantilla, sobre ese núcleo duro de jugadores que ha protagonizado un ciclo triunfal pero que envejece irremediablemente.
Algunos, como Rudy, trabajan para repuntar tras un verano de descanso, pero su campaña pasada fue muy floja. Por eso el Madrid ha fichado a Causeur, para encontrar alternativas en un puesto de escolta que resulta clave. El francés puede actuar también de alero si Maciulis, otro de los jugadores que fue a menos, no recupera pujanza o Laso le utiliza más en la posición de cuatro.
Por dentro, el Real recupera con Kuzmic (2,14) la figura del pívot grande que aporta defensa interior, bloqueos y rebote para acompañar a Ayón. A cambio se ha marchado Hunter, que no encajó como se esperaba. Randolph y Thompkins serán los cuatros con Reyes de comodín. Quizá se eche en falta la presencia de un interior móvil con más energía defensiva. Randolph, enchufado en toda la pista, puede ser la solución.
Y en la dirección, el que aspiraba a ser el mejor trío de Europa se ha quebrado por la lesión de Llull. Campazzo, que vuelve para ser importante, Llull y Doncic eran compatibles los tres a la vez en la pista, con el canterano como alero generador de juego. De hecho es muy probable que en la Euroliga Doncic cumpla con ese papel bastantes minutos. El fichaje de Chasson Randle lo hace posible. Al menos, en principio. El base-escolta estadounidense llega justo a tiempo para iniciar la competición. Físico, tiro y potencial para convertirse a medio plazo en un muy buen jugador en el Viejo Continente. Una buena plantilla pero con interrogantes por resolver para poder aspirar a ganar la Euroliga.
Estrella - Luka Doncic
BASE - 18 años - 2,01 m
Coge el liderazgo en ausencia de Llull
La baja de larga duración de Llull (tardará casi un año en ser otra vez el mismo, aunque puede jugar antes) fuerza a realizar un traspaso en el liderazgo del equipo. Por talento y brío los galones deben ser ahora para Doncic. El canterano, que aún está dando el estirón, será una pieza vital en el equilibrio del grupo, como lo será Campazzo con su dirección y carácter.
