ESPECIAL ASCENSO A SEGUNDA

La temporada 2019-2020 ha vuelto a resultar un éxito para el Atlético Baleares teniendo en cuenta que repite título en un grupo diferente y repite playoff por segundo año consecutivo, algo al alcance de pocos clubes de Segunda B. Con uno de los presupuestos más altos de la categoría, este será un nuevo intento por alcanzar el fútbol profesional en los últimos años en los que siempre ha fallado en el momento clave. Muy lejos quedan ya sus cuatro temporadas en el fútbol de plata, allá por las décadas de los cincuenta y los sesenta del pasado siglo, pues los blanquiazules militaron en Segunda las campañas 51-52 y 52-53 y posteriormente las temporadas 61-62 y 62-63.

El Atlético Baleares se funda en 1942, fruto de la fusión de los clubes Baleares FC y Athletic FC, logrando en la década de los cuarenta el ascenso a Tercera y disfrutando de un crecimiento importante en los cincuenta, de hecho ascendiendo a Segunda por primera vez en la temporada 50-51 con un histórico exmadridista como entrenador, Gaspar Rubio. Tras dos temporadas en Segunda desciende y en 1956, 57 y 58 juega la promoción pero no consigue subir. La construcción del estadio Balear sustituye al antiguo campo de Son Canals y e inicios de los sesenta vuelve a subir a Segunda donde está dos temporada y tras descender en 1963 ya no ha vuelto a subir. Han pasado 57 años. Los setenta vinieron marcados por una crisis importante; en los ochenta toca fondo y es en los noventa cuando vuelve a estabilizarse en la tercera división balear. De hecho pasa por una etapa en la que en doce años, entre 1991 y 2002, juega once fases de ascenso a Segunda B y las pierde todas. Flirtea con la desaparición y cae incluso a la Regional Preferente. A mediados de la primera década del nuevo siglo, en la campaña 2005-2006, inicia una nueva etapa de crecimiento y regresa a Tercera, y 18 años después vuelve a Segunda B; un año después baja a Tercera y a la siguiente regresa de nuevo a la categoría de bronce, y a partir de ahí inicia su consolidación en Segunda B y se convierte en SAD.

Recientemente sus intentos por subir a Segunda resultan todos frustrantes y agónicos. En la 2011-12 es campeón de grupo pero cae en el playoff ante Mirandés primero, y Lugo después. En la 2012-13 sufre para mantenerse y en la 2013-14 es quinto y se queda fuera del play-off. En 2014 llega el empresario alemán Ingo Volckmann que transforma el club, con él llega la estabilidad económica y los proyectos de futuro como remodelar el Estadio Balear y dejar de jugar de prestado en Magalluf o Son Malferit, y sobre todo intentar de nuevo el ascenso. En la temporada 2015-16 logra el primer título de la entidad, la Copa Federación. Y en la 2016-17 cae en el play-off ante el Albacete. La 2017-18 resulta mediocre y en la 2018-19 intenta de nuevo el asalto. Es campeón de grupo otra vez y cae ante el Racing de Santander. En la repesca supera al Melilla, pero vuelve a perder ante el Mirandés, quedándose de nuevo a las puertas de manera cruel. Su historial se resume con 2 temporadas en segunda; 15 en Segunda B (las diez últimas consecutivas); 53 en Tercera y 5 en regional Preferente.

La plantilla del Atlético Baleares 2019-2020 se confeccionó buscando el mayor equilibrio posible, con la intención de duplicar posiciones y tratando de obtener capacidad goleadora, algo que la pasada campaña le faltó al equipo de Manix Mandiola. No obstante, hay que destacar que los equipos del técnico vasco se hacen de atrás hacia adelante, y por lo tanto la misión fundamental estaba en hacer un equipo defensivamente fuerte y a partir de ahí crecer en la creación y en el gol, algo que ha seguido lastrando al equipo como lo demuestra que en fases de la liga le ha costado mucho 'matar' los partidos y le ha costado demasiado ganar fuera de casa.

La solvencia defensiva ha sido un hecho pero la carencia goleadora también. El fichaje de Cervero no funcionó y acabó saliendo del equipo y la llegada en enero de un experimentado en Primera y Segunda como Lekic aún no ha dado resultado porque su baja forma y después el parón le han impedido incluso llegar a debutar. Solo ha respondido a las expectativas atacantes el delantero Gabarre que con sus 15 goles y 6 asistencias en 29 partidos ha sostenido al equipo en muchos partidos.

Junto al máximo realizador hay que destacar la excelente temporada de Manu Herrera en la portería hasta que una lesión le dejó fuera del equipo, y los centrales Villapalos, un mediocentro reconvertido y el veterano y capitán Vallori, un jugador que en sus buenos tiempos llegó a militar en el Munich 1860 d ela liga alemana o en Suiza con el Grasshoppers. Podría decirse que Herrera, Vallori, Villapalos y Gabarre han sido la columna vertebral de un equipo al que Rovirola y Jordan Holsgrove manejaban desde el centro del campo. Lamentablemente el escocés no estará en el play-off porque su equipo de origen, el Reading, no ha aceptado la ampliación de su cesión después del 30 de junio y desde que acudió a Inglaterra a recuperarse de una lesión antes del confinamiento, ya no ha regresado.

Manix Mandiola responde a los cánones de entrenador de fútbol clásico, de fútbol del norte, práctico, sin adornos ni extravagancias, llamando a las cosas por su nombre, aplicando justicia y sentido del humor a partes iguales y sin dramatizar nunca. El veterano técnico eibarrés (62 años) tiene una Peña a su nombre en su tierra y allí se reúnen los técnicos vascos a charlar de fútbol.

En su larga trayectoria ha dirigido a RU de Irún, SD Beasain, Deportivo Alavés, SD Eibar, Tudelano, Burgos y desde 2017 al Atlético Baleares, donde llegó para salvarle de un descenso y al año siguiente hacerlo campeón de grupo y jugar un play-off dramático que le dejó sin ascenso. Este año repite, vuelve a ser campeón de grupo, en un grupo distinto pues el equipo pasó del grupo III al grupo I, y el fútbol le ofrece una nueva oportunidad de alcanzar la segunda división hora a un partido, a 90 minutos.

Su equipo es como él, un fiel reflejo, práctico, fuerte en defensa y sin florituras. Ha manejado la plantilla buscando siempre el beneficio colectivo y no se ha casado con nadie, lo que ha provocado algunas diferencias que sin embargo no han descabalgado al equipo. No es de los que piensa en los que no están y se limita a contar con lo que tiene y con ello va a la guerra. Con sus resultados y su talante se ha ganado a la afición blanquiazul que le tiene en los altares en los últimos años.

Ingo Volckmann, presidente: "El ascenso sería cumplir un sueño"

Después de las oportunidades pasadas y frustradas, ¿este año es una ilusión, un reto o una obligación?

Una obligación, estamos por segunda vez en el play-off como líderes pero es verdad que en tiempos raros, por eso no podemos decir mucho más sobre cómo está el equipo, todo está siendo muy diferente, antes del parón el equipo tenía un buen ritmo pero ahora no lo sabemos, aún así estoy ilusionado.

Para Ingo Volckmann persona, ¿qué supondría el ascenso?

Cumplir un sueño, como presidente, como propietario, pero también como Ingo Volckmann, claro, yo siempre busco objetivos importantes, de altura, y estamos otra vez muy cerca, dolió mucho lo del año pasado y este año espero que no duela tanto porque la verdad es que fue muy duro, pero esto es fútbol y espero que este año tengamos un poco de suerte, entre la pelota y subamos.

Si todo va bien, ¿cuántas cosas tendrá que afrontar para poder jugar en Segunda?

No tantas como pueda parecer, la verdad es que estamos bastante bien, al Estadio le falta una grada pero más o menos está todo planeado y vamos a empezar con tres gradas y la última llegará más tarde, estamos más o menos bien para poder jugar en Segunda división, estaría todo preparado.

Habría que renovar mucho la plantilla.

Sí, pero cuando no sabes si vas a jugar en una categoría u otra, no sabes qué va a pasar, el año pasado ya tuvimos el mismo problema y entonces hicimos un buen equipo para Segunda B y si subimos, seguramente haremos un buen equipo para Segunda División.

Dijo su capitán Vallori que el fútbol le debe un ascenso al Atlético Baleares.

Estoy de acuerdo, han luchado mucho para ello, y antes, en los tiempos del presidente Fernando Crespí también estuvieron muy cerca.

¿Tiene pensada alguna promesa si hay ascenso?

Este año no he pensado nada, el año pasado pensé en un fiesta de una semana en Miami, pero la verdad es que este año como todo está siendo muy raro, ya veremos, haremos una buena comida y no sé, no hay nada más pensado, pero algo haremos, claro.

¿Ingo podría con todo o necesitaría un respaldo económico y de gestión en materia de estructura?

No, yo siempre afronto mis cosas yo solo y con gente que trabaja para mí, gente que tiene muchas más ideas posiblemente para algunas cosas, pero yo siempre quiero mandar y hacer las cosas por mi cuenta.

Manix Mandiola: "Tenemos una oportunidad histórica"

¿El fútbol concede segundas oportunidades?

Y terceras, y cuartas, yo llevo muchas guerras aquí, lo que pasa es que solo vale la última, lo pasado no te da de comer ni lo puedes utilizar más que como referencia, pero aquí vivimos el presente y éste dice que tenemos una oportunidad histórica y tenemos que intentar aprovecharla.

El presente es un misterio porque las actuales circunstancias nos impiden saber realmente cómo llegan los equipos.

Eso es verdad, hay una referencia en Primera y en Segunda división donde equipos que iban como un tiro se atascaron y otros que parecía que no arrancaban se pusieron a ganar partidos, pero de todas formas los buenos siguen siendo buenos y los que tienen problemas son gente que ya tenía problemas antes.

¿Los futbolistas cómo están, ilusionados o atemorizados ante un reto tan peculiar?

Quiero pensar que están ilusionados, lo contrario me chocaría mucho y me resultaría extraño que a futbolistas con su prestigio personal en juego y ante una oportunidad como esta se asustaran, en una carrera futbolística de doce o catorce años no hay muchas oportunidades como esta de lograr un ascenso a un partido, en 90 minutos, quiero pensar que mis futbolistas son inteligentes y que están ilusionados ante ello.

¿Le condiciona mucho la ausencia de Jordan Holsgrove en el centro del campo?

No. Me hubiera gustado que estuviera, pero no está y para mí los más importantes son los que están y con los que están tengo plena confianza y espero que resulte suficiente; si hubiera estado, pues mejor, y si hubiese venido Messi (risas), pues también, pero apelar a los que no están no tiene sentido.

¿Qué valoración hace de su rival, el Cartagena?

Es un equipo con mucho peso en la categoría y que lleva unos años ahí queriendo entrar en el fútbol profesional, y algo hará bien para estar ahí, si ha ganado esta liga en su grupo es porque ha hecho muchas cosas bien, y la verdad es que cualquiera que nos hubiera tocado tiene la misma dificultad, son todos equipos como nosotros, equipos buenos que han conseguido ganar la liga regular.

Hay un precedente en pretemporada, les ganaron ellos por 3 a 2. ¿Queda muy lejos? ¿Sirve de algo?

Pues ni me acordaba de eso, fíjate si queda lejos; no sirve de nada, todo ha ido cambiando, hasta hemos cambiado jugadores durante la temporada. No sé lo que pasará pero vamos a competir, haciendo un símil con el mundo del atletismo, diré que si nosotros estaremos cerca de nuestro mejor registro, no vamos a decepcionar a nuestra afición en cuanto a trabajo y vamos a dejarnos el alma.