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Bloodborne, guía completa - Yahar’gul, la Aldea Invisible

Plántale cara a la decadente locura victoriana de Yharnam, encuentra los puntos débiles de todos los enemigos y siéntete un poco más seguro en el nuevo universo de FromSoftware con nuestra guía.

Yahar’gul, la Aldea Invisible.

En el siguiente vídeo os mostramos cómo superar la primera mitad de nuestro regreso a la Aldea Invisible y las principales novedades que os encontraréis aquí, así como los ítems ocultos que podréis encontrar en vuestra llegada al onírico escenario y los principales enemigos a los que deberéis hacer frente.

Dado que, por motivos técnicos, no podemos ofreceros la solución completa en vídeo, proseguimos la explicación paso a paso en texto para que superéis este inquietante nivel del juego y os abráis paso hasta el capítulo final.

Tras derrotar a los dos Ogros y al anciano con la metralleta, abre el cofre para hacerte con el arma exclusiva Tonitrus pequeña, un arma de fuego que genera chispas en el suelo y dañarán a los enemigos que se aproximen a ti. Vuelve a la plaza donde estaban las hechiceras y mira atentamente a la pared de tu derecha: hay un hueco por el que puedes colarte y por donde sigue tu camino. Desde aquí, podrás tirarte al interior de una de las celdas para conseguir la llave que te permitirá llegar a la zona opcional Distrito de la Catedral Superior (para más información, echa un vistazo a nuestra sección “zonas opcionales”).

Regresa a la plaza y avanza hasta llegar a una gran explanada custodiada por una de esas enormes criaturas. La novedad aquí está en que la criatura no es inofensiva, pues lanzará un rayo láser al suelo para, después, provocar una explosión. Al igual que al principio del nivel, tienes que hacer sprint para llegar al otro lado y llegar, por fin, a una lámpara. Enciéndela para mejorar tus atributos en el Sueño del Cazador, algo que deberías hacer imperiosamente.

Cuando regreses, avanza y dirígete a la mujer de la campana siniestra para matarla y evitar que se regeneren los enemigos. Encontrarás, próxima a ella, un cadáver con sangre fría frenética y, un poco más adelante, otro cuerpo inerte con 8 viales de sangre. No está mal…

Estarás de vuelta a las celdas inferiores, donde comenzamos en nuestra visita opcional a Yahar’gul y que os mostramos en el gameplay de la Catedral de Yharnam. Te las vas a ver con una tríada de cazadores, que supone uno de los enfrentamientos más duros de todo el juego… si no sabes cómo afrontarlo. Si te fijas, uno de ellos te está dando la espalda: blanco y en botella. Acércate cuidadosamente a su posición y mantén BOTÓN R2 con tu arma extendida para asestar un golpe crítico a tu rival. Inmediatamente después, los demás cazadores se percatarán de tu presencia, pero ojo: acaba con el que está a punto de morir. Ahora puedes hacer dos cosas: hacerte el héroe y disputar la pelea contra los dos cazadores restantes (que te puede salir bien, no lo negamos)… o morir, regenerarte en la lámpara que acabas de encender y volver para descubrir que, sorpresa, no existe respawn de enemigos en esta pequeña zona: te encontrarás a los dos cazadores restantes y, encima, dándote la espalda ambos, por lo que no tienes más que repetir la táctica anterior para derrotarlos. Recoge los jugosos ítems que dejarán al morir y sigue avanzando.

Tu objetivo ahora es habilitar un atajo que conecte la zona inicial con esta parte que parece estar bajo tierra. Acaba con la mujer siniestra y el tirador cercano y activa el elevador para interconectar ambas zonas. Ten en cuenta que podrás subirte a un tejado para llegar a un altar luminoso que tendrá su función más adelante.

Baja de nuevo a la zona donde habías descubierto el elevador y peina ambos caminos. Pese a la bifurcación, el camino no tiene pérdida: encontrarás enemigos a izquierda y derecha que deberás abatir para conseguir los ecos de sangre y recoger los abundantes ítems que dejarán al caer. No te olvides, por dios, de acabar con las mujeres siniestras… o caerás ahora y deberás repetir toda la zona.

Sólo te queda dar unos pasos más hacia delante para vértelas con…

**FINAL BOSS: EL RENACIDO**

Es un combate en el que prima la fuerza bruta, de ahí que fuera tan importante recolectar cuantos más objetos mejor para afrontar la pelea con pertrechos que te puedan salvar el pellejo.

El Renacido tiene tres ataques principales:
· golpes con cualquiera de sus extremidades.
· saltos que generan una onda expansiva letal.
· vómito paralizante que puede llegar a encharcar toda la plaza.

La clave de este enfrentamiento está en permanecer bajo él y atacar sin piedad las extremidades sobre las que se apoye. Conforme lo vayas hiriendo, dejará asomar una pequeña cabeza que deberás golpear para infringirle daño extra. Además, estando debajo de él corres el riesgo de que salte y te aplaste con toda esa mole de huesos que compone su cuerpo, así que en cuanto veas que sus extremidades inferiores se separan del suelo ponte a rodar como si no hubiera un mañana.

Un dato importante: deberías ir a por las mujeres siniestras que merodean por el escenario antes de centrarte en El Renacido, o entonces sabrás lo que es un nivel imposible. Se encuentran al fondo, justo arriba de las escaleras del otro lado.