Juan Cruz nos da su opinión sobre los acontecimientos deportivos de este fin de semana con especial atención a la Selección Sub-17 femenina campeona del mundo.
Dembélé ha dejado atrás sus migrañas y otros accidentes de su ánimo y se ha convertido en decisivo para recuperar al Barça para el fútbol feliz
En él funciona la intuición, naturalmente, que por eso se entrenó en campos pobres, donde todo se consigue a base de lucha, de rebusque.
Terrible símbolo del fútbol: el partido más esperado, el del siglo, el que no se va a olvidar nunca, se ve envuelto en maldad y armas de herir, de matar.
Tanto esperar
Cuando sólo estábamos en la grada los veteranos, los vocablos del fútbol tenían que ser, como los de las bebidas, en español.
Furia y amistad
El Barça de Valverde no sabe jugar en el medio campo, y tampoco en la defensa, de modo que dependió del heroísmo en los últimos pases.
El fútbol es un juego imán. Te acercas a él y ya no te deja. Ahora, además, es de hombres y mujeres, se acabó el fútbol como cosa de chicos, necesita voces así, más poesía.
Jugó sin saber adónde ir, perdió balones, los sustituyó por aire y casualidad, encajó dos goles, pudo haber encajado otros, hizo sustituciones desesperadas...
Como si fuera otro, este Barça no tuvo en cuenta de que en León, la patria de César, hay que jugar en serio.
A Lopetegui lo arrancó Florentino Pérez de la disciplina de la selección nacional cuando ésta se exponía al momento cumbre de su cuatrienio
En una epifanía para un nuevo aficionado que acude por primera vez a ver un Clásico con siete años, y encima animando al equipo rival, el autor reflexiona sobre el triunfo.
Fue el Clásico de ayer un partido atípico. Incluso por el resultado, que algunos cantaban ignorando que un encuentro de estas características puede salir por peteneras.
Madridistas y barcelonistas discutimos antes de los clásicos como si ya se hubieran jugado, porque hay estadísticas que dan la victoria global a uno u otro.
Donde verdaderamente discurrieron los gestos del partido fue en la zona de la grada en la que el ausente, Lionel Messi, explicaba fútbol a su hijo Thiago
Florentino se apresuró en fichar entrenador, pero no tuvo en cuenta un elemento básico del juego: los jugadores. De esa prisa viene el día de hoy.
Estupor en el Camp Nou. Un jugador sevillista sin culpa le rompe el codo a Messi. El líder del Barça queda inutilizado. Llora. Atrás deja dos goles.
Jorge Valdano viene de Argentina, donde los niños leen aún sin dientes. Les leen los padres, les leen en las guarderías, y leen ya para toda la vida.
El fútbol es un juego que encanta a los niños y que a los veteranos, como este mismo cronista, mantienen alerta. Antes pasaba...
El primer resplandor, ese gol del Valencia a los 78 segundos, convirtió al Barça en una víctima avergonzada. Tuvo que ser Messi, quién si no, el que pusiera las tablas...
Javier Matallanas, el hermano de Carlos Matallanas, hablando de Carlitos, su hermano futbolista, crítico de fútbol, entrenador, ser humano que ahora comunica, con palabras que le salen del alma...
Me apasiona el fútbol. Nada mejor que una jornada como la del sábado, dos partidos en la cumbre, la evidencia de que el Sevilla le ha agarrado el gusto a la calidad.
El presidente del Barça decidió que se jugara el partido entre el club azulgrana y Las Palmas, que es lo que había ordenado Messi en silencio.
Otro partido triste
Página12