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Zero Zone

Zero Zone - El Secuestro de Sunny Boy

Leemos la nota que nos deja nuestro querido, difunto y desconocido padre, Al Gonzo, en la que nos comenta que debemos contactar con su socio, Matt Muttron, que es el que lleva los asuntos comerciales de la compañía Kanary. ¿Seras capaz de descubrir este entramado?

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EL SECUESTRO DE SUNNY BOY

Acudimos al TBT, donde estábamos citados [y excitados] con la bárbara [ehem] chavala. Pero ésta nos dice que el plan se nos ha ido por el sumidero de la piscina, puesto que el famoso cantante Sunny Boy ha sido secuestrado por las fuerzas del mal. Un argumento bastante complicado, ¿verdad? Aunque claro, teniendo en cuenta el sistema de replicación de las Zero Zone lo más probable es que el malvado Muttron se halle detrás de este pestilente asunto. Así que indagamos un poco más hablando con los dos robots que parecen regentar el antro y luego con la verde moza.

De vuelta a la guarida de Kyle, parece que este está algo echo polvo... alguna cosa le sentaría mal de la cena, probablemente los callos al curry. Parece ligeramente muerto. Bueno, tendremos que apañarnos sin él.

De la caja de disquetes cogemos un par de discos, y desechamos el que pone Gadget, pues contiene el virus más grande del mundo [más incluso que win98]. De la disquetera del ordenador sacamos el disco titulado "parada de emergencia" [debe tratarse de un Mac], y ponemos en ella [me refiero a la disquetera, perversos pervertidos de mente perversa] el disco etiquetado como "inicio" [momento que aprovecha Lone para hacer acto de presencia] y luego el etiquetado como "Zero Zone". Luego nos dirigimos a un lugar a mano izquierda donde hay una especie de armatoste con tres trompas. Pulsad sobre la del centro y un pequeño "tray" o posavasos aparece por la derecha de su consola. Colocad allí el disco de cierto cantante desaparecido [no me refiero a Kurt] y ya tenemos el sistema de duplicación de la Kanary en marcha.

Regresamos al cabaret para ver si nos encontramos a nuestro objetivo militar de color verde. En la barra del bar encontramos un diario, que es imprescindible que nos leamos ahora mismo. La sección de relax es prescindible. Se lo mostramos a nuestra amiga de color verde, y luego con el camarero, que nos suministra una invitación para una fiesta... qué envidia me tenéis, ¿eh?

De vuelta a la Kanary, la recepcionista de los ojos penetrantes y los labios ardientes, pero no parece muy interesada en el pobre Stan. Así que nos vamos al despacho, recibimos un mensaje precisamente de ella en la que nos dice que nos ha preparado un pequeño refrigerio para celebrar nuestra vuelta, y lo descubrimos sobre la mesa de la cámara derecha del despacho. Así que tomamos el champan, la copa y las patatas fritas. Llenamos la copa con champan y se lo ofrecemos a la secretaria, hablamos con ella, le damos unas cuantas patatas y le damos la invitación. Stan 2 - Nenas Ciber 0. Otra cita.

Vamos al Hemeralope, y luego al cabaret. Hablamos con el guardia para poder entrar y localizamos a la secretaria en unos asientos a la izquierda. Pero primero hablamos con Riley [parece el policía de Casa Blanca] y luego con el camarero, al que le pedimos dos cócteles diseñados para fundir hembras de lo más frígido. Dos porque es mejor prevenir que ir al proctólogo. Pero prosigamos. Hablamos con la secretaria y le proporcionamos los dos cócteles, tras lo cual se le suelta la lengua como a las becarias... ¿este chiste ya lo he usado? Pues nada, que casi confiesa sus pecados. Volvemos con el camarero, le damos lo que nos pide [total, para qué queremos un extintor y el martillo] y le damos el supercóctel anulador de voluntades y libertador de lívidos.

Evidentemente, ahora estamos en el apartamento de Al Gonzo. Nada más entrar Stan, suena el timbre de la puerta y entra a toda velocidad la ardiente y acalorada secretaria. Que ni corta ni perezosa se dirige disparada al dormitorio. ¿Qué es esa sensación en los pantalones? Así que Stan va al dormitorio para interrogarla a fondo y sondearla a modo... una vez... y otra... ¿otra?... ¿ande puse la Viagra?... ¿qué te crees, que no tengo sentimientos?... ¿otraaaaaa?... ¿argh...? ¡Bárbaro, ayúdame, que no quiere que deje de interrogarla y se me acaban las energías...!!!

Tras abandonar el dormitorio [usando la fuerza de la voluntad] Stan pide ayuda al camarero, que sólo le proporciona un vaso de agua. Será posible. Necesito Tauritón lo menos. Stan le añade unos somníferos. Y suministra la mezcla a la secretaria para que entre en estado de trance anestésico.

Aparece el chucho, que nos felicita por haber resuelto el puzzle más raro de todos los tiempos. Tras hablar con él dos veces, nos proporciona una llave allen, que usada en la secretaria nos permite sonsacarle la información que tiene contenida en un floppie.

La dejamos con el chucho... a saber lo que hará el ente cibernético con ella mientras tanto... y nos vamos hasta la guarida de Kyle para usar su ordenador. Metemos el recién adquirido floppie en la ranura del ordenador y le confirmamos al ordenador que queremos que lo lea. Conseguimos las coordenadas del búnker de Muttron.

En la guarida susodicha encontramos, tras una silla, al hortera de Sunny Boy... ¿este tío es el que funde a las chavalas, y no mi varonil presencia? [clama El Bárbaro, con su famoso grito de guerra... quins cullons] La cuestión es que no parece dispuesto a abandonar el encierro en el que le mantiene Muttron por razones un poco... digamos... de ropero.

Así que volvemos al apartamento [en el dormitorio no hay nadie, pero alguien ha dejado su firma en el cuarto de baño] y vamos al ropero donde hallamos, dentro de una caja cerca de donde Lone se echa esas siestas, unos zapatos [preciossssos], una chaqueta [de lentejuelas, muy cuuuuuca] y unos calzoncillos de seda con frivolidades.

Con todo este arsenal de argumentos, volvemos a ver a Sunny. Opcionalmente, podemos usar el cepillo para ver si funciona, pero lo práctico es entregarle esa ropa tan... ehem... bueno, es ropa. Las tres piezas, no os quedéis con ninguna.

Acudimos al TBT para ver si todo está en orden. Tras hablar tres veces con el robot podemos entrar en el estudio de grabación y departir un poco con Sunny. El plan para crear las ninfómanas cibernéticas... estoooo... para liberar a los ciber sigue su camino... sí, hay un argumento, que conste en acta... ¿dónde está la secretaria?