El Grupo G era el único que contaba con cinco selecciones, ya que todos los demás tenían seis. En teoría, los favoritos eran Portugal y Serbia. En la práctica, todo muy diferente. Portugal hizo lo se esperaba, pese al tropiezo inicial contra Albania, y acabó líder. Pero en los siguientes puestos llegó la sorpresa. Albania, hasta ahora una selección débil, consiguió un histórico segundo puesto, enviando a Dinamarca a la repesca. Serbia, por su parte, fue la gran decepción al quedar cuarta, a 8 puntos del tercero. (Foto de apertura: La selección de Albania celebra su clasificación para la Eurocopa).

Cristiano, el hombre gol de la Eurocopa

Nueva página en el libro personal de los récords de Cristiano Ronaldo. En el partido de ida contra Armenia, el 14 de noviembre de 2014, el capitán luso se convirtió en el máximo goleador de la historia de la competición al anotar su tanto número 23, 17 en eliminatorias y seis más en fases finales. Hasta ese momento compartía el liderato con el danés Tomasson, que entre 1998 y 2008 había hecho 22 dianas. Fue el segundo gol del delantero en esta fase de clasificación y ayudó a que Portugal se colocara como segunda, comenzando así la remontada en la tabla. Al final, Cristiano acabó como el jugador con más goles del equipo, al hacer cinco de los once tantos que acumuló en total su selección.

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Un drone desató el caos

El partido que enfrentaba a Serbia y Albania estaba considerado de máximo riesgo debido a la enemistad entre ambas aficiones y la tensión política entre los países por el conflicto de Kosovo. Por eso se decidió que se jugase sin hinchas albaneses en la grada. El choque se estaba desarrollando con normalidad en el estadio de Belgrado hasta que apareció un dron sobrevolando por el campo con una bandera denominada “Gran Albania”, lo que generó el enfado de los espectadores. Ante esto, el jugador serbio Stefan Mitrovic recogió la bandera y varios rivales le comenzaron a empujar. Esto desencadenó en una tangana sobre el césped que tuvo que ser dispersada. El árbitro tuvo que interrumpir el partido y, posteriormente los suspendió por lo ocurrido en el terreno de juego y por el lanzamiento de petardos y bengalas desde la grada, así como un intento de invasión de campo por parte de los aficionados Serbios tras la irrupción del dron.

Todo hacía indicar que el castigo a ambas selecciones sería ejemplar, pero al final no lo fue tanto en proporción a la magnitud de los hechos. Serbia fue sancionada con tres puntos y a jugar los dos próximos partidos a puerta cerrada, mientras que a Albania se le castigó con la derrota del partido por 3-0, aunque posteriormente una sentencia del Tribunal de Arbitraje Deportivo revocó la decisión y otorgó la adjudicación de la victoria por 3-0 a Albania. Además, ambas federaciones recibieron una multa de 103.000 euros cada una. Los dirigentes las selecciones trataron de recurrir las sanciones, pero la UEFA se mostró firme y las mantuvo.

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Con Santos llegó la alegría

La Federación Portuguesa de fútbol perdonó a Paulo Bento la eliminación en la fase de grupos del Mundial de 2014. Siguió confiando en él para el nuevo reto de la Eurocopa. Pero la derrota contra Albania, considerada por muchos como vergonzosa, supuso el golpe definitivo para que el técnico fuera despedido. Portugal debía enderezarse y Bento no parecía el adecuado. Llegó entonces Fernando Santos y la selección lusa no volvió a ceder ningún punto. Aun dejando alguna duda con su juego, en los siguientes siete partidos que jugó sólo conoció la victoria. Contra Dinamarca selló su clasificación gracias a un gol de Moutinho. Portugal estaría así en su noveno gran torneo internacional de forma consecutiva, una vez disputados cuatro Eurocopas y dos Mundiales. Y, después de lidiar con cuatro repescas seguidas, dos mundialistas y dos europeas, esta vez lo haría de forma directa y como líder de su grupo con 21 puntos, siete por encima de Albania.

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Albania, la gran sorpresa

Lo que hizo Albania en esta fase eliminatoria fue inaudito. Acostumbrada a estar siempre en lo más bajo, la selección dirigida por Gianni de Biasi, ex entrenador del Levante, entre otros, logró un histórico segundo puesto que suponía la clasificación directa para la primera Eurocopa de su historia. Los albanos empezaron con buen pie ganando contra Portugal a domicilio con el solitario gol de Balaj. Después, con un juego basado en explotar al máximo los errores del rival y fructificar sus ocasiones, lograron tres victorias más, dos empates y sólo dos derrotas. En el último partido se impusieron a Armenia con un cómodo 0-3 para certificar la gesta y mandar a Dinamarca a la repesca.

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Serbia sucumbió ante Dinamarca

La regularidad mostrada por Dinamarca le llevó a meterse en la repseca. Dos momentos claves de esta situación fueron sus victorias consecutivas ante Serbia, una de las grandes favoritas. En el partido de ida los daneses se impusieron por 1-3, mientras que en la vuelta por 2-0. Estos seis puntos le dieron un soplo de aire fresco para afrontar lo que restaba de fase de clasificación, mientras que dejaron a los serbios sumidos en un frío cuarto puesto. Los de Ćurčić no realizaron una buena fase de clasificación, marcada más por los altercados de sus aficionados por el fútbol.

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Hovsepyan no pudo sacar a Armenia del pozo

El entrenador suizo Bernard Challandes dimitió como seleccionador de Armenia tras perder 2-1 contra Albania el 29 de marzo de 2015, dejando al equipo colista y sin conocer la victoria, con tres derrotas y un empate. La Federación de Fútbol de Armenia eligió como sustituto a Sargis Hovsepyan, que ostentaba el récord de internacionalidades armenias con 131 partidos. El joven técnico de 42 años se encontraba en ese momento entrenando a la selección sub-21 y al FC Pyunik, pero decidió aceptar el reto de dirigir a la absoluta. Debutó contra Portugal en un encuentro que su equipo luchó hasta el final, e incluso logró ponerse por delante. Sin embargo, un hat-trick le fulminó, aunque en los últimos minutos los armenios acortaron distancias y soñaron con el empate. Después llegaron dos derrotas más y un empate, ante Dinamarca, que impidieron al equipo abandonar la última plaza.