Santiago Segurola

Pocas decisiones elevan más el calor de los debates que la presencia del hijo del entrenador en la alineación.

El delantero marcó los dos goles a Malta. Ante Noruega dispuso de varias oportunidades, falló, pero jugó con vitalidad.

Luis Enrique pudo acudir a los jóvenes, como Löw en Alemania, o ampliar el espectro. Se ha inclinado por esta posición.

Zidane traslada un comportamiento y una imagen que el hincha asocia con la posición del Madrid en el mundo del fútbol.

Es casi imposible no sentirse técnico interino en el Real Madrid. Solari no abandonó nunca su condición de entrenador provisional. Zidane asume un riesgo...

Las dos últimas temporadas blancas han manifestado decadencia. El actual Madrid no necesita una gran figura, sino una revolución.

El Clásico mostró todas las claves negativas del Madrid. A Vinicius casi se le pide que resuelva los problemas que aclaraba Cristiano.

La derrota dura contra el Barça en Copa reveló la fantasía con Bale que se apoderó en la dirección del club después de la final de Kiev.

Lejos de consolidar al técnico, el club le expuso a la erosión. El Levante dio un repaso al Madrid, frágil en todos los aspectos.

Solari había encontrado la llave para generar expectativas, se disparó el optimismo y se habló de triplete y, de repente, vuelven las sombras.

Ante el Ajax Ramos se anticipó, venció en las jugadas divididas, sostuvo la defensa en las oleadas del rival y transmitió al Madrid la serenidad necesaria.

Solari pretende pertenecer a la estirpe de Zidane y Del Bosque, dos técnicos sin experiencia en Primera que dirigieron al Real Madrid procedentes del Castilla.

El Madrid salió fortalecido del Camp Nou y Solari, aún más. El argentino ha diseñado un equipo que funciona.

Sin apenas explicación, el Madrid se ha convertido en un equipo tenaz y vigoroso. Algo tendrá que ver el entrenador...

El Madrid es otro equipo. Todo el mundo quiere jugar, y más aún en la tormenta de partidazos que viene.

Después de su golazo, Bale dio la impresión de haber logrado su objetivo y hasta desvincularse del juego. No volvió a tocar la pelota. Eso sí, marcó un gol de bandera...

Luka Modric ha saltado la fatiga física y mental. Karim Benzema empieza a encontrar los socios necesarios.

Todos los del Madrid jugaron bien y algunos como en sus mejores días. Kroos volverá obligado a mejorar su discreto rendimiento del ejercicio.

La única certeza es que Isco está al fondo del banquillo. El Madrid terminó sometido, con una posesión del 24 por ciento...

El Real Madrid apenas ha cambiado de aspecto en los últimos años. Abundan las promesas y no aparecen estrellas.

Brindó en el antiguo Madrigal una actuación sensacional. Depositario de una gran generación que se despide del fútbol.

No hay manera de adivinar su futuro. Su estancia al frente del equipo blanco depende solo de los resultados.

Bale es un futbolista de momentazos, un jugador para los líquidos tiempos actuales, de 'highlights' en YouTube y veloces resúmenes de televisión.

Algo se ha roto en la relación de la hinchada con un Real Madrid que no convoca. Al equipo le falta construcción.