El delicado arte del equilibrio

Habla Domenicali para legitimar desde su conocimiento de la materia lo que ya podía haber adivinado cualquier observador. Sensacional carrera de Alonso, reacción positiva de Massa y preocupación por el escenario general que se atisba en este Mundial de Fórmula 1. Vettel y su Red Bull asustan tanto que poco puede hacer el talento de su piloto español mientras siga teniendo que dedicar la mayor parte de las carreras a remontar, no a plantar batalla al alemán. En consecuencia, la siguiente obviedad: el F138 debe mejorar su rendimiento a una vuelta como único camino hacia una calificación más efectiva. El desafío ahora para los ingenieros de Maranello es conseguir ese objetivo... pero siempre dentro del delicado arte del equilibrio. 

Me refiero a que las soluciones técnicas que permitan hacer del Ferrari más rápido en tandas cortas (básicamente calentando antes los neumáticos) no deben entrometerse en la consistencia del coche en carrera. Y ese compromiso, me da la impresión, no es nada sencillo. Quizá el monoplaza más homogéneo en tal sentido es precisamente el Red Bull, cualidad en la que reside buena parte de su éxito. Tener un coche rapidísimo en calificación pero que no desfallezca en competición es un reto y veremos si la Scuderia es capaz de asumirlo... porque hasta ahora no ha sido así. Me preocupa que en el experimento lo que se gane por un lado se pierda por otro... y estemos en las mismas. Pero sí, Ferrari tiene que intentarlo y ojalá que acierten plenamente.

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