El futuro ya está aquí. Fichajes 2.0 y úlceras para todos
Se acaba un ciclo. Y este parece que se acaba en serio. El sábado pasado fui consciente que ese latiguillo que durante más de dos siglos ha acompañado a la prensa y que reza "..al cierre de esta edición fulanito aún no se ha pronunciado" está más acabado que la Hoja del Lunes. En la madrugada del sábado al domingo, a las 3:30 concretamente, Neymar confirmaba vía Instagram (otra zarandaja a tener controlada) que fichaba por el Barça. El club culé y el Santos, instantáneamente lo confirmaban vía Twitter y Facebook. Los diarios lo reflejaron en sus sitios web. Ahora me doy cuenta que he escrito un párrafo en el que he usado cinco palabras que no existían cuando Cruyff llegó al Barça.
La pesadilla de Cannavó. El legendario director de La Gazzetta dello Sport, Candido Cannavó me dio un día una clase particular camuflada en entrevista en la que decía: "Ahora los periodistas tienen más relación con sus teléfono y su ordenador que con sus zapatos porque corremos el riesgo que el reporterismo de calle quede relegado a favor de un periodista de redacción que se pasa el día mirando Internet y hablando por teléfono. Si una noticia es fácil, no es noticia".
La pesadilla de los clubes. Claro que el tornado no distingue redacciones de gabinetes de prensa. La globalización de los medios mediante las Redes Sociales dan como resultado un ataque de úlcera también (bendito sea) en los que intentan controlar la información. Cualquiera con un teléfono móvil y 3G, (Edmilson por decir un menda) puede colgar una foto (al tuntun, elijo la firma de Neymar) que alguien (el Barça) no tenía previsto ofrecer. Pequeñas satisfacciones de una batalla perdida.
¿Qué opinión vale? La otra duda de los gabinetes de comunicación viene de si le tienen que hacer más caso a las Redes o a los socios. A Florentino y a Mou les ponen a caldo en internet, pero en el campo les aplauden. Rosell cobró ayer tras el acto con Abidal, pero falta ver al Camp Nou mañana. No sé responder a la pregunta, pero con que produzca una nueva úlcera en ciertos estómagos, me vale.
Dos realidades. Por un lado los socios y por otro las Redes. A los que mandan les importa lo mismo ambas. Marchando una úlcera.