No hay miedo, pero la Selección sí ha cargado con temores desde su debut ante Japón. Es la carga de la responsabilidad del anfitrión, que a veces da alas, pero en otras ocasiones atenaza.
PorJuan Gutiérrez
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No hay miedo, pero la Selección sí ha cargado con temores desde su debut ante Japón. Es la carga de la responsabilidad del anfitrión, que a veces da alas, pero en otras ocasiones atenaza.
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