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World of Warcraft

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World of Warcraft - Orcos

La vida en Azeroth es brutal, triste y, sobre todo, corta...

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ORCOS

Los salvajes Orcos de piel verde son una de las razas más prolíficas de todo Azeroth. Se cree que son brutales y estúpidos, y que no tienen empatía o humanidad por otras razas. Nacidos en el infernal mundo de Draenor, los Orcos fueron traídos al Reino de Stormwind a través de la puerta dimensional conocida como el Portal Oscuro y forzaron a los Humanos a librar una guerra.

Aunque pocos son conscientes de su historia, los Orcos una vez fomentaron una sociedad noble y chamanística en el mundo de Draenor. Trágicamente, los orgullosos clanes Orcos fueron corrompidos por la Legión Ardiente y utilizados como peones en la invasión de la Legión sobre Azeroth.

Los Orcos consiguieron rebelarse, sin embargo, y al final fueron capaces de ayudar a cambiar las tornas en la batalla contra los señores de los demonios. Liderados por el joven Señor de la Guerra, Thrall, los Orcos han reclamado su fuerza y honor. Ahora, los Orcos se alzan preparados para luchar, no por el placer de la conquista sino por su derecho a sobrevivir en el mundo que los ha adoptado.


Localización inicial: Durotar
Ciudad Principal: Orgrimmar
Transporte: Terrestre, Lobos. Volador, Wyvern

Clases:
Warlock | Guerrero | Shaman | Cazador | Rogue

Narración de Introducción

Hace mucho, la Horda orca fue corrompida por la Legión Ardiente y atraída hacia el mundo de Azeroth para luchar contra los reinos de Lordaeron y Stormwind. A pesar de que la Horda fue derrotada, un joven y visionario jefe, llamado Thrall, reina para guiar a su gente en su más oscuro tiempo.

Bajo el mando de Thrall, los orcos se liberaron de las cadenas de corrupción demoníaca y abrazaron sus orígenes chamanísticos. Después de años de vagabundear, los orcos fundaron su hogar en las calientes y desiertas tierras de Durotar.

Con capital en la ciudad de Orgrimmar, están listos para destruir a cualquiera que quisiera cuestionar su supremacía. Como orgulloso defensor de Durotar, es tu deber matar a cualquier enemigo, visible o no, puesto que los insidiosos agentes de la Legión Ardiente aún se pasean por el mundo.